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Figura 60
Plano de la mansión de Hadjiabad
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  III. Catálogo: el arte en el Imperio Sasánida  

La mansión sasánida de Hadjiabad

Durante las obras de nivelación realizadas cerca del pueblo de Hadjiabad (Fars, Sur de Irán) en 1977, se encontraron numerosos fragmentos de piezas que motivaron el inicio de una excavación sistemática en el invierno de 1978 (Azamoush 1994). Hadjiabad se encuentra cerca de la antigua Darabjerd, capital de la región oriental de Persia, donde Ardashir I —el fundador de la dinastía real sasánida-tuvo su primera residencia cuando ostentaba el cargo de gobernador. En la campaña de excavaciones dirigida por M. Azarnoush se descubrió el complejo de una casa de campo aristocrática, que data de la época de Shapur II (309-379 d.C.). No lejos de allí se encontraba un pequeño asentamiento fortificado. El edificio se construyó esencialmente con ladrillos de adobe sin cocer y está dividido en tres zonas: la parte A es un complejo alargado con piezas de grandes dimensiones agrupadas axialmente, cuyas paredes estaban decoradas con pinturas y estucos, y se trata de la parte noble de la edificación. La parte B, situada en el sudoeste de la A, reúne una serie de salas y patios pequeños sin decoración que se suponen aposentos privados. La parte C, en el noroeste, está estructurada de forma similar a la parte B, pero las estancias son más grandes y están decoradas parcialmente con estuco. Puede que esta zona de la casa tuviera una función sacra que los arqueólogos relacionan con el culto a la diosa Anahita (Azarnoush 1994, 66-90).

El acceso principal a la parte A, situado en el lado sur, está dividido por cuatro columnas rectangulares y conduce a un gran patio, delimitado en los lados este y oeste por muros divididos en nichos. Al Norte encontramos un iwan —la característica sala abovedada persa— abierto al patio. Detrás de este iwan principal se encuentra otro patio más pequeño que comunica a su vez con otro iwan. Este complejo, que es la zona representativa de la edificación, posee las características principales de la arquitectura palaciega sasánida, introducida por Ardashir I en el palacio de Firuzabad.

El centro del complejo sacro excavado en la parte C es una sala rectangular con un patio en la zona delantera. Las paredes de la sala estaban divididas en nichos que acogían figuras de una divinidad femenina a tamaño natural [FIG. 60]. Al Norte seguía una sala de planta cruciforme cubierta por una cúpula, quizás dedicada al culto del fuego (Azarnoush 1994,81-88). Una peculiaridad de la arquitectura sasánida son las decoraciones de estuco, que adornaban no sólo los interiores de palacios y edificios sagrados, sino también el ámbito privado. En la mansión de Hadjiabad cabe destacar la sala de la zona sacra C, cuyas paredes, nichos y puertas estaban totalmente revestidas de figuras, medallones con bustos y cenefas de estuco. Los fragmentos de estuco presentados en nuestra exposición no se encontraron en el transcurso de la excavación, sino durante las obras de nivelación, y es posible que todos ellos procedan del complejo sacro C. El busto de Shapur II (num. cat. 151) seguramente coronaba una columna adosada perteneciente a una decoración mural de un patio (unidad 107) situado ante el «Santuario de Anahita» (sala 114) [FIG. 60a]. El patio fue destrozado casi completamente por las máquinas niveladoras. El torso de una estatua vestida (núm. cat. 153), de la cual existe otra pieza semejante, podría hallarse en la entrada situada ante el «Santuario de Anahita». La cabeza femenina (núm. cat. 152) pertenece a una de aquellas estatuas vestidas que se encontraban en los nichos murales del «Santuario de Anahita» A la misma zona pertenecen las losas de nicho con putti (núm. cat. 154), probablemente en el remate superior de la decoración mural. La mayoría de los elementos de estuco, bustos y figuras empleados en Hadjiabad están confeccionados con moldes. Las piezas más grandes —por ejemplo, las estatuas de los nichos— se formaron uniendo varias piezas. (M. A.)

   
 
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