Servet y el fanatismo
Miguel Serveto y Conesa nació en Villanueva de Sijena (Huesca, España) un 29 de septiembre de 1511 y murió a los 42 años víctima de la intolerancia religiosa. Han transcurrido cinco siglos y no parece que hayamos aprendido. Sin ir más lejos, hoy mismo hemos conocido las consecuencias de aquélla: "Una turba enloquecida atacó ayer, tras el preceptivo rezo musulmán de los viernes, la sede de la ONU en la ciudad de Mazar i Sharif, al norte de Afganistán, y mató a siete trabajadores del organismo internacional -tres miembros de la misión y cuatro guardas de seguridad, todos ellos extranjeros- en venganza por un episodio irrelevante que en su momento no despertó el menor interés periodístico: la quema de un ejemplar del Corán en una minúscula iglesia de Florida." (EL País)
Intolerantes y fanáticos de una y otra religión propagan el odio y la violencia a lo largo y ancho del mundo, y por eso el 500 aniversario del nacimiento de Miguel Servet debería servir para algo más que destacar sus logros científicos.