Enero de 2012

Repasando las últimas noticias me encuentro con una sorpresa mayúscula: Megaupload ha sido cerrado por el FBI y varios de sus directivos arrestados. La denuncia fue interpuesta en Eastern District of Virginia y el hecho de que algunos servidores de la mencionada empresa estén en Ashburn (Virginia) ha dado cobertura legal a la intervención del FBI.

Se les acusa de violar los derechos de propiedad intelectual. No hay duda de que Megaupload es el más popular entre los sitios de intercambio de archivos (música, películas, etc) pero no es menos cierto que ha sido muy alabado por el sector audiovisual por la rapidez con la que atendía a sus demandas ya que borraba los contenidos en cuanto tenía conocimiento de alguna infracción.

Por otra parte, Megaupload almacena también millones de GB en documentos que nada tienen que ver con el motivo del cierre. De hecho, se usa para guardar documentos personales o para que algún amigo pueda descargarse contenidos legales que "pesan" demasiado como para mandarlos por correo.

La medida adoptada es a todas luces desproporcionada y afecta a cientos de millones que personas que no han cometido delito alguno y que ahora comprueban atónitos que no pueden acceder a sus documentos.

Un sitio en Internet ha sido cerrado y no ha sido necesario un juicio. Esta es la pavorosa realidad. La cuenta atrás para Internet ha llegado a Occidente.

Nota en relación a la Ley Sinde: la primera medida a tomar en cuanto se ponga en marcha no puede ser otra sino denunciar a todos los buscadores, incluyendo a Google. Todos ellos enlazan contenidos protegidos por las leyes de propiedad intelectual y obtienen pingües beneficios por ello. ¿No es eso lo que persigue la mencionada Ley?

Maqueta del Museo
Maqueta del Museo

El museo se encuentra situado en El Puente de Sabiñánigo, en un magnífico edificio del siglo XIX, ejemplo de la arquitectura popular de la zona: casa Batanero.

Está compuesto por dos colecciones: la etnológica, una de las más completas del ámbito pirenaico y que nace gracias a las labores efectuadas por la Asociación "Amigos de Serrablo", y por las obras del escultor oscense Ángel Orensanz.

A través de sus salas, distribuidas en dos casas con tres plantas cada una, el visitante podrá captar las esencias de la sociedad tradicional pirenaica como, por ejemplo, las creencias que la sustentan, la economía de montaña, los oficios o la música popular. Un valor añadido de este museo radica en que muchas de sus piezas se exponen en su lugar natural.

Y hasta aquí la información proporcionada por el folleto que edita el museo y cuyas actividades podéis seguir en su sitio.

Añadir tan solo que se trata de una visita obligada para los más jóvenes. Tal vez así descubran el esfuerzo con el que las generaciones pasadas trabajaban y vivían, y de paso reflexionar sobre las comodidades que les ofrece el mundo actual.

Cabecero
Cabecero

Dintel procedente de casa Oliván, en el pueblo abandonado de Otal. Donado por sus antiguos propietarios, fue rescatado por Amigos de Serrablo valiéndose de un helicóptero que lo trasladó hasta un camión que aguardaba en el túnel de Cotefablo. Se trata de una pieza excepcional, del siglo XVI, hecha cuando se reconstruyó el edificio de dicha casa. Situación que conmemora recogiendo la heráldica de sus dueños y abundante simbología propiciadora, cristiana y precristiana.