Civilizaciones (Continuación)

Vasija silbato. Guatemala o México. Siglo V. Cerámica

En los recipientes de esta doble vasija se enfrentan un pájaro sobrenatural, de aspecto temible, y un joven arrodillado. La postura sumisa del muchacho sugiere que está disimulando su intención de atraerlo y derribarlo. Pese a ser derrotada, el ave es una majestuosa deidad considerada como una manifestación de Itzamnaaj. El silbato ubicado en su cabeza suena cuando el receptáculo contrario se llena de agua.


Esta vasija es una de las piezas que se pueden contemplar en la exposición Las vidas de los dioses: la divinidad en el arte maya en el Museo Metropolitano de Arte (New York) que puede visitarse hasta el 2 de abril de este año.

En esta ocasión, tanto el resumen de la exposición como la descripción de los objetos en el sitio online de la muestra están en español.

Miembros del Conjunto Folklórico Nacional «Sabo» (Uzbekistán) por las calles de Jaca (Huesca) con ocasión de la cuadragésima octava edición del Festival Folklórico de los Pirineos (2015). Y para conocer su folclore, nada mejor que ver y escuchar su actuación en el mencionado festival.

 

Una vez que los trabajadores levantaron los ataúdes de Tutankamón del sarcófago de piedra de la tumba, Carter limpió la tapa del segundo ataúd. La momia del rey todavía yacía dentro del ataúd más interno.
Una vez que los trabajadores levantaron los ataúdes de Tutankamón del sarcófago de piedra de la tumba, Carter limpió la tapa del segundo ataúd. La momia del rey todavía yacía dentro del ataúd más interno.

El arqueólogo británico Howard Carter descubrió la tumba de Tutankamón en noviembre de 1922. Tras años de infructuosas excavaciones, Carter prácticamente había agotado tanto el tiempo del que disponía como la financiación, y justo entonces un miembro de su equipo encontró de casualidad una piedra tallada. Era el 4 de noviembre de 1922 y aquella piedra era la parte superior de una escalera enterrada. Al día siguiente se desenterraron 12 escalones llegando a una puerta. Tras ella un pasadizo que daba a una tumba. Carter abrió un pequeño agujero en la piedra labrada, acercó una vela encendida y miró en su interior. Lord Carnarvon, el mecenas de la excavación, preguntó: ¿Ve algo?, a lo que Carter respondió: Sí. Es maravilloso. Acababan de descubrir la tumba del Rey Tutankamón. Cien años se cumplen de aquella gesta.

Para profundizar en el descubrimiento de esta tumba y la importancia que tuvo para Egipto, he seleccionado los siguiente recursos:

Tragaluces de la cúpula de la sala central de El Bañuelo
Localización: El Bañuelo (Granada) - Fecha: 24/abril/2014 - Cámara: Nikon D80 - Distancia focal (DX): 18 mm - Diafragma: f/3.5 - Velocidad de obturación: 1/60s - Sensibilidad ISO: 200

En el mundo islámico, el agua es considerada un don divino y es símbolo de pureza y sabiduría. Aunque destaca su importancia en el ámbito religioso, no cabe duda de que también influyó en la arquitectura, la agricultura y las infraestructuras hidráulicas de la antigüedad. Además, no debemos olvidar que los baños públicos (hamman) eran de gran importancia en esta cultura y no sólo por los aspectos relacionados con la higiene sino sobre todo porque eran un espacio fundamental para las relaciones sociales.

La fotografía que acompaña a este texto muestra un detalle de los tragaluces octogonales en forma de estrella de la cúpula de la sala central o templada de los baños árabes de El Bañuelo, Granada (más información). Imaginen el placer de estar sumergido en agua templada mientras los rayos de sol te acarician suavemente...

Masada. La fortaleza se encuentra en el borde occidental del desierto de Judea, cien kilómetros al sur de Jerusalén, en un remoto valle con vistas al mar Muerto y rodeada por escarpados acantilados que se elevan 400 m. Foto: Photostock Israel / Getty Images.
Masada. La fortaleza se encuentra en el borde occidental del desierto de Judea, cien kilómetros al sur de Jerusalén, en un remoto valle con vistas al mar Muerto y rodeada por escarpados acantilados que se elevan 400 m. Foto: Photostock Israel / Getty Images.

Un grupo de sicarios y zelotes desafiaron a las legiones romanas desde lo alto de la imponente fortaleza de Masada. Tras un largo asedio, los judíos decidieron darse muerte antes que rendirse al enemigo.

Por Arturo Sánchez Sanz. Universidad Complutense (Madrid).

«Masada no volverá a caer», afirmaba el poeta Yitzhak Lamdan en 1927, cuando los judíos estaban creando en Palestina el embrión del futuro Estado de Israel. Lamdan se refería a un episodio célebre en la historia del pueblo judío: el asedio romano a la fortaleza de Masada en el año 73, que terminó con la decisión de los defensores –960 hombres, mujeres y niños– de suicidarse antes que rendirse al enemigo; un ejemplo de heroísmo que debía servir de inspiración a los judíos del siglo XX. Más tarde, las Fuerzas de Defensa de Israel celebraron durante muchos años su juramento de fidelidad a la patria en la cima de Masada, repitiendo al unísono la famosa frase de Lamdan.

Hoy en día, sin embargo, hay dudas sobre si aquel episodio sucedió realmente tal como lo cuenta la única fuente que habla de él: La guerra de los judíos, del historiador judío romanizado Flavio Josefo. Aunque Josefo era contemporáneo de los hechos narrados, jamás visitó Masada y en su obra se mezclan elementos históricos con otros ficticios. Seguir leyendo ...

Entre finales del siglo V y comienzos del siglo IV a.C. tuvieron lugar ciertos ritos que consistieron en destruir y sellar una serie de edificios monumentales situados en el curso medio del río Guadiana, en Extremadura. De aquellas estructuras solo quedaron los túmulos, montículos artificiales bajo los cuales yacían los restos arquitectónicos. El primero en descubrirse y excavarse fue Cancho Roano (1978); años más tarde, en 2014, fue localizado un segundo conjunto monumental en la finca Casas del Turuñuelo, de Guareña (Badajoz). Dada su ubicación, próximo a la desembocadura del río Búrdalo (comarca de las Vegas Altas del Guadiana), es muy probable que desde allí se controlara un extenso territorio.

Desde la primera campaña de excavaciones este edificio único en el área geográfica del Mediterráneo occidental ha venido ofreciendo sorpresa tras sorpresa. En la actualidad, expertos de una veintena de instituciones colaboran en la exploración para desentrañar todos sus secretos.

Dado que el artículo es de pago, lo transcribo a continuación manteniendo todos aquellos enlaces a contenido de acceso libre: Seguir leyendo ...

En lengua luganda, la palabra nsenene describe los saltamontes de cuernos largos que son la columna vertebral de una importante industria en Uganda. Estos insectos nocturnos son un crujiente manjar que se sirven hervidos o fritos, y se recolectan en grandes cantidades durante las estaciones lluviosas de mayo y noviembre. Un poético documental dirigido y producido por Michelle Coomber sigue a los lugareños mientras colocan precarias trampas y recogen hordas de grillos bajo el cielo nocturno.

Narrado por un cazador de saltamontes llamado Ibrah, "Nsenene" mira a través de la oscuridad y el humo de una hoguera cercana para iluminar el proceso de recolección. Los insectos se sienten atraídos por las brillantes luces que se encuentran alrededor de altos paneles de hierro, que aturden a los grillos y los hacen caer en los tambores abiertos de la base. "Añadimos humo para que la luz forme una lente en el cielo, y los saltamontes se emborrachan con el humo. Caen en los barriles como gotas de lluvia en un techo de hojalata", explica el narrador.

Pero los ruidosos grillos también están impregnados de tradición. "Hay muchas creencias, como que si una mujer embarazada los come, su hijo tendrá cabeza de saltamontes", dice Ibrah, cuya familia ha participado en la industria durante generaciones. "Algunas personas creen que provienen del agua de los lagos. Otros dicen que surgen del suelo como las hormigas. Yo creo que no son de este mundo".

Coomber ha cosechado múltiples premios por "Nsenene" en Raindance, el Festival de Cortometrajes de Sydney y el Festival de Cine de Fargo, por nombrar algunos, y puedes ver más trabajos suyos en su página web y en Vimeo.

Localización: Lituénigo (Zaragoza) - Fecha: 6/jul/2013 - Cámara: Nikon D80 - Distancia focal (DX): 62 mm - Diafragma: f/4.5 - Velocidad de obturación: 1/60s - Sensibilidad ISO: 200.
Localización: Lituénigo (Zaragoza) - Fecha: 6/jul/2013 - Cámara: Nikon D80 - Distancia focal (DX): 62 mm - Diafragma: f/4.5 - Velocidad de obturación: 1/60s - Sensibilidad ISO: 200.

Entre los objetos que se mostraban en la Feria de oficios perdidos de Lituénigo, me llamó la atención está capoladora porque me recordó las matacías que normalmente se llevaban a cabo en las propias casas de los pueblos con la asistencia del matachín. Aún me parece estar viendo como se capolaba la carne con esta máquina. En su orificio de salida se colocaba el morcal para recoger el picadillo y dejar así preparado el embutido para su curación.

Protege lo que quieres: «Con esta cremà nos gustaría enviar un mensaje poderoso al mundo: si no proteges la naturaleza y las cosas que amas, desaparecerán antes de que te des cuenta que estaban ahí. Con la escultura de 23 metros de altura que construimos, representamos algunas de las especies más amenazadas del mundo y mostramos que hoy se han ido. Estas especies ya no existen. Aunque esto es solo una metáfora, podría ser real muy pronto si no cambiamos nuestro comportamiento» —Dulk.

La falla municipal de Valencia para las Fallas de 2022 fue obra del creador urbano Dulk y el artista fallero Alejandro Santaeulalia.

Hace cuatro siglos, un pequeño poblado esquimal en el que vivían unas 5o personas fue atacado. Nadie sobrevivió.

Los registros orales del pueblo yupik conservan los recuerdos de una época que los historiadores llaman "Las guerras del arco y la flecha". Se trataría de una guerra fratricida probablemente provocada por la falta de alimento ya que este período sangriento coincidió con el enfriamiento de la Tierra (Pequeña Edad de Hielo).

La tragedia, sin embargo, nos permite ahora reconstruir la vida cotidiana de los yupiks en Alaska. En Nunalleq, un rectángulo de tierra y barro, se han recuperado más de cien mil piezas en un estado de conversación casi perfecto debido a que han estado congeladas desde el año 1600. Entre ellas, algunas realmente excepcionales como máscaras rituales, agujas de marfil para tatuajes, fragmentos de kayaks y un cinturón de dientes de caribú.

Por desgracia, otro cambio climático puede tener consecuencias desastrosas en los vestigios de culturas antiguas tanto en Alaska como en otras zonas. El aumento de las temperaturas y el deshielo que provoca están dejando al descubierto numerosos yacimientos en los que, de no actuar con prontitud, la destrucción de sus restos será inevitable.

Recursos: Blog de la excavación :: What was life like for Yup'ik people living on the Bering Sea coast 500 years ago? :: Los esquimales y su lucha diaria por la supervivencia.