Las aves son animales fascinantes a los que solemos oír más que ver. Tal vez por eso, cuando contemplamos imágenes de ellos no dejan de sorprendernos. Los premios de fotografía «Audubon» nos ofrecen una pequeña muestra de lo que nuestros ojos se suelen perder. Cada una de las imágenes ganadoras viene acompañada por la historia que hay detrás de cada disparo.
En esta décima edición además se han añadido dos categorías más. El premio Fisher está dirigido a imágenes con un enfoque creativo donde se combine la originalidad con la experiencia técnica. El otro, Plantas para pájaros, exige no solo la captura de un momento mágico sino que en la toma figuren tanto un ave como una planta nativa del lugar en la que se tomó aquélla. El objetivo es resaltar el papel que desempeña el hábitat nativo en la vida de las aves.