El legado invisible en Aragón

Toda la vida de una ciudad, en torno a un gran espacio. De Cesaraugusta, pasando por Saraqusta a Zaragoza. Desde los romanos hasta la actualidad, la Plaza de las Catedrales ha visto celebraciones, juicios, asedios, ampliaciones y reformas. Y, en torno a ella, los espectadores conocerán alguno de los edificios emblemáticos, como la Lonja, el Museo del Foro, el Palacio Arzobispal y, por supuesto, la Seo y la Basílica del Pilar.

Desde tiempos de los romanos, los numerosos ríos aragoneses han justificado infinidad de obras hidráulicas de singular envergadura, que han determinado la vida de valles y comarcas hasta nuestros días. La noche de este martes, ‘El legado invisible’ se zambulle en la presa romana de Muel, el Monasterio de Rueda, los aljibes de Teruel, el Canal Imperial y la Expo del agua de Zaragoza para atravesar sus muros y las curiosidades que los envuelven.

La primera parada de Nacho Navarro será el Monasterio de Rueda. El origen de su nombre está en la gran rueda hidráulica, o noria, que eleva el agua desde el Ebro para distribuirla por todo el recinto y regar sus huertas. Un lugar que, por su grado de conservación, parece haberse detenido en el tiempo.

Después, el programa saltará en el tiempo hasta el siglo 15 AC para visitar la presa de Muel, en la provincia de Zaragoza, es de los restos más relevantes de la arquitectura civil hidráulica de la Hispania romana. Allí, una ermita, construida sobre los sillares del embalse, preside el conjunto de la obra. ‘El legado invisible’ también viajará hasta Teruel para descender hasta los aljibes que el rey Pedro IV ordenó construir. Así solucionaría el problema del abastecimiento de agua en la ciudad. Símbolo de la hidráulica de la capital turolense es el Acueducto de Los Arcos, una de las más grandes obras de ingeniería españolas del siglo XVI.

Ya en Zaragoza, Nacho Navarro recorrerá el Canal Imperial, un ambicioso proyecto pensado para el regadío, la industria y el transporte de mercancías y pasajeros. Los espectadores podrán ver la muralla de Grisen, las esclusas de Casablanca, y los depósitos de Pignatelli y, finalmente, Valdegurriana.

La Expo del Agua supuso un gran impulso para toda la región. ‘El Legado Invisible’ culminará en la cima de uno de sus lugares más representativos, la Torre del Agua. Con su característica forma de gota y sus 76 metros de altura, es uno de los edificios más altos de Zaragoza.

«El legado invisible» recorre en este capítulo las huellas que los reyes de Aragón han dejado en el patrimonio. El Palacio Arzobispal de Zaragoza, la Sala de la Campana, la Torre de La Zuda de Huesca, San Lorenzo o Agüero son algunos de los enclaves que Nacho Navarro recorre este lunes con el escáner del programa.

En el Palacio Episcopal de Zaragoza, mostrarán distintos espacios que fueron testigo de señaladas ocasiones para la corona. Los dormitorios con alumbramientos, como el de Isabel de Portugal; el Salón del Trono, con coronaciones como la de la reina Sibila; o la curiosa logia que el obispo construyó para Felipe II, con unas particulares pinturas renacentistas.

La enigmática ermita de Santiago en Agüero deja constancia del poder real. El edificio, de gran envergadura, fue, según apuntan algunas teorías, un encargo de Ramón Berenguer IV para el retiro de su suegro, Ramiro II El Monje. El santuario está rodeado de misterios sin resolver, desde la intención de su construcción hasta el motivo por el que quedó inacabada.

Un recorrido por la Huesca monumental es clave para entender episodios de la realeza tan característicos como la batalla de Alcoraz, que dio lugar a la conocida frase "como Pedro por su casa", haciendo alusión al momento en el que Pedro I atraviesa la muralla de la capital oscense. En la antigua universidad, en su día Palacio de los Reyes de Aragón, 'El Legado Invisible' se hace eco de la leyenda de la campana, cruento suceso con Ramiro II El Monje de protagonista y la referencia a las nupcias de Doña Petronila y Ramón Berenguer IV en la capilla del Palacio, acontecimiento que aseguró la continuidad de la estirpe y del Reino de Aragón.

Por último, la Real Basílica de San Lorenzo muestra las reliquias del santo, que llegaron hasta su ciudad natal gracias al empeño de Felipe II. Así, dos de ellas viajaron de Roma al templo oscense con peculiar forma de parrilla, símbolo del patrón de la localidad. Sin olvidar que la que hoy conocemos como Real Basílica de San Lorenzo, se construyó sobre una iglesia anterior en cuya edificación intervino la mano del rey Jaime II de Aragón.

Alguno de los conjuntos monumentales más bellos y mejor conservados de España y, por qué no, del mundo, se encuentran en Aragón. Palacios, plazas mayores, monasterios… Un viaje por sus empedrados transporta al espectador a otra época. Un recorrido por los mejores edificios civiles y religiosos de los siglos V al XV.

Aragón es tierra de leyenda y su milenaria historia está salpicada de mitos, héroes, y brujas. La omnipresente figura de la Santa Inquisición contribuyó a ello. Ilustres como Bécquer o Goya fijaron su talento en sus historias. Un sinfín de aquelarres, tradiciones y hasta documentos hablan de terribles torturas en mazmorras para curar posesiones malignas y dejan huellas de las brujas por todo Aragón.

Teruel es un museo al descubierto. Presume de su mudéjar, que está declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y que se exhibe en espacios como la Catedral de Santa María de Mediavilla o las Torres de El Salvador o San Martín. Pero es mucho más. La ciudad de El Torico tiene rincones espectaculares, soluciones arquitectónicas ingeniosas como su acueducto o un interesante patrimonio modernista en sus edificios decimonónicos.

Musulmanes, judíos y cristianos. Durante siglos, la presencia en Aragón de las tres religiones ha dejado un legado de incalculable belleza y magnitud. Vestigios como baños, sinagogas, palacios, mezquitas… cuando no barrios enteros en forma de judería o medinas conservan la esencia y han demostrado que la convivencia secular era posible. Se mostrarán los espacios más ocultos y los secretos mejor guardados del Palacio de la Aljafería, la iglesia de Aniñón, la sinagoga de Híjar o la Catedral de Tarazona.

Edificios representativos de épocas furibundas en las que los litigios se resolvían en duelos y los señores de la guerra tenían sus propios ejércitos. Símbolos ostentosos de poderío que permitirán recorrer siglos y siglos, desde castillos milenarios como la Torre de Abizanda a la ciudadela pentagonal del Castillo de San Pedro de Jaca, que defiende ininterrumpidamente desde hace cinco siglos el paso desde Francia.

Enlace al video en Aragón TV: http://alacarta.aragontelevision.es/programas/el-legado-invisible/

El programa emprende un viaje cargado de leyendas por los lugares desde los que Ramiro I fue construyendo el Reino de Aragón. Descubrirá los panteones reales, los sarcófagos más enigmáticos, los vestigios de esa estirpe batalladora que fundó, consolidó el reino y paró el avance musulmán por encima del Ebro. Hasta el monasterio románico de San Pedro el Viejo, en pleno corazón de Huesca, donde se retiró Ramiro II el monje, y donde está enterrado, en su pequeño panteón real, junto a su hermano Alfonso I el Batallador.

Enlace al video en Aragón TV: http://alacarta.aragontelevision.es/programas/el-legado-invisible/