ETA (Continuación)

A estas alturas de la noche, los etarras deben ir ya por la quinta o sexta botella de cava porque el espectáculo ofrecido por unos y otros es de risa. Bueno..., de risa para los asesinos; para cualquier demócrata, despreciable y rastrero: la guerra de los vídeos. Las víctimas se merecen todo menos el circo que están montando a cuenta de la negociación con ETA.

Actualización (10:12 h.): el PP responde en su web.

La política antiterrorista propugnada por Aznar —basada en la lucha policial y judicial, y la Ley de Partidos— concitó, a diferencia de la actual, numerosos apoyos tanto en la sociedad civil como en la clase política. Hoy, gracias a investigaciones periodísticas, sabemos que algunos de aquellos apoyos eran tan falsos como el beso de Judas y así, mientras el PSOE manifestaba su total adhesión a la política de Aznar, negociaba al mismo tiempo con Batasuna en términos opuestos al Acuerdo por las Libertades y contra el Terrorismo. Acusar ahora al PP, después de tan innoble comportamiento, de mostrase contrario a la actual negociación por meras cuestiones partidistas expresa la deriva moral y ética de Rodríguez Zapatero en esta cuestión.

Por otra parte, el respaldo obtenido por Aznar en la fallida negociación con ETA se debió probablemente a dos circunstancias: en primer lugar, se trataba del primer atisbo de esperanza en cuanto a la posibilidad del fin de ETA; en segundo lugar, los antecedentes no auguraban en modo alguno concesiones políticas. De hecho, se produjeron acercamientos de presos al País Vasco sin que la sociedad civil o la clase política protestara lo más mínimo. Nada hacía sospechar que estuvieran en juego las estructuras del Estado o el modelo territorial.

¿Cuál es la situación actual? El 7 de abril del presente año, tras la remodelación del gabinete socialista, escribía: «Rubalcaba tiene un perfil más político que Alonso pero, desde mi punto de vista, es el menos indicado. De él se puede esperar todo excepto transparencia y juego limpio. La promesa formulada por Zapatero en el sentido de no pagar un ‘precio político’ no contaba, hasta ahora, con argumentos en contra pero con este nombramiento se han encendido todas las alarmas. Espero equivocarme».

A partir de ese momento las alarmas se han disparado una detrás de otra. Primero fue el cese de Fungairiño; segundo, el giro dado por la Fiscalía y la aplicación de lo que podríamos denominar «indultos anticipatorios»; tercero, la mesa extraparlamentaria donde supuestamente se negociarán las compensaciones políticas a cambio de la paz; y cuarto, la victoria pírrica en Estrasburgo donde no se logró ni el apoyo de los conservadores irlandeses, obteniendo tan sólo trasladar la división de opiniones existente en España al resto de Europa (con ETA robando armas al mismo tiempo).

¿Qué hacer ahora? Lograr la unión de todas las fuerzas políticas en esta cuestión. ¿Cómo? Nombrando una comisión secreta formada por personalidades de distinto signo político para llevar a cabo una discreta negociación. Ésta versaría exclusivamente sobre el desarme, la reinserción de los etarras y el regreso de Batasuna a la arena política. El documento base, como ya indiqué en su momento, podría ser el siguiente:

1.- ETA-Batasuna se compromete a:

  1. Entregar todas las armas, explosivos y demás material susceptible de ser utilizado en actos terroristas.
  2. Facilitar la labor de la Justicia. Todos los componentes de la banda terrorista que hayan participado en actos delictivos se entregarán a la Justicia de forma que todas las causas judiciales pendientes de resolver se puedan esclarecer. Los que no hubieran participado en atentados donde se produjesen heridos o muertos, podrán acogerse al punto 2.4.
  3. Entregar tanto los recursos monetarios como cualesquiera otros - casas, pisos, vehículos,… - que hayan sido obtenidos gracias a la comisión de actos ilegales (secuestros, impuesto revolucionario, etc). Estos fondos se destinarían a las víctimas del terrorismo y a cubrir las responsabilidades civiles derivadas de los actos terroristas.
  4. Pedir perdón por el dolor causado a tantas familias y renunciar de forma expresa a la violencia como método para alcanzar fines políticos.

2.- El Estado, por su parte, se compromete a tomar las siguientes medidas:

  1. Legalizar a Batasuna.
  2. Aprobar medidas que faciliten la reinserción social y laboral de quienes abandonen definitivamente las armas.
  3. Trasladar a todos los presos de la banda terrorista a la cárcel más próxima a su domicilio habitual o a la de sus familiares, siempre y cuando rechacen de forma explícita la violencia.
  4. Otorgar el tercer grado penitenciario y el pase al "régimen abierto" a los presos sin delitos de sangre siempre y cuando rechacen de forma explícita la violencia y hayan cumplido, al menos, un tercio de su condena.
  5. Pedir perdón a la sociedad española por la "lucha sucia" (GAL) y renunciar de forma expresa a utilizar medidas contrarias a la Ley y al Estado de Derecho. El Estado, además, se compromete a indemnizar a los que sufrieron tales prácticas ilegales o a sus herederos en caso de fallecimiento.

18 de ocrubre, sesión plenaria del Congreso:

  • Pregunta Rajoy (PP): «¿Cómo explica el presidente que la Fiscalía General del Estado, cuyo titular ha sido designado por su gobierno, plantee ahora una rebaja de penas al terrorista de Juana Chaos?» Durante su intervención, precisa aún más: «¿Ha motivado la huelga de hambre el cambio de criterio? ¿Ha habido otra razón distinta? ¿Cuándo tenía razón el fiscal, cuando pidió 96 años —que fue hace tres meses, en junio— o cuando pidió seis años?». Respuesta de Rdez. Zapatero: ninguna, tal y como pueden comprobar. A estas alturas, negar la influencia política en las decisiones del Fiscal General es de una ingenuidad que raya lo estúpido. Personalmente, la petición de 96 años me parece, a la vista del Código Penal, exagerado, pero también a mi me gustaría saber si el cambio se ha debido a razones meramente jurídicas o, si por el contrario, "alguien" ha dado la correspondiente orden política en aras del "proceso de paz".
  • Pregunta de Acebes (PP) a la vicepresidenta: ¿Va a aceptar el gobierno la constitución de una mesa de negociación política con Batasuna? Se refiere, en concreto, a la llamada mesa de partidos que, se supone, se reunirá al margen de las instituciones democráticas. La respuesta de Fdez. de la Vega es la misma, si no peor, que la de su presidente: ninguna. En este caso, la desfachatez del gobierno es realmente tremenda.

12 de octubre, en un restaurante de Barcelona. Allí se reúnen Sala i Martin y el ínclito Montilla para una entrevista, la cual acaba como el Rosario de la Aurora, es decir, a insultos. Para diversión de unos y enfado de otros, aquí está la transcripción completa. El entrevistador puso toda la carne en el asador, tal vez demasiada, pero abrir la caja de la ira no es la mejor respuesta y, desde luego, deja en muy mal lugar al candidato socialista.

Texto íntegro de la declaración del presidente del Gobierno:

ETA declaró el 23 de marzo pasado por primera vez un alto el fuego permanente, por primera vez después de tres años sin atentados mortales, y por primera vez, en situaciones de este tipo, habiendo desaparecido prácticamente la totalidad de sus acciones. En distintos momentos del periodo democrático hemos tenido expectativas de poder alcanzar el fin de la violencia. Los gobiernos sucesivos, tanto el de Felipe González como el de José María Aznar, intentaron alcanzar la paz. No fue posible. Lo intentaron de buena fe. Y desde aquí mi reconocimiento a esos esfuerzos que en su día hicieron. Lo singular de la situación no es tanto lo que ETA ha dejado de hacer, sino lo que los demócratas hemos hecho durante todos estos años, defendiendo los valores democráticos, defendiendo los valores constitucionales, y de manera muy singular todos los ciudadanos de nuestro país. El objetivo de todos los gobiernos ha sido la erradicación de la violencia en el País Vasco y en el resto de España. Para ello ha habido distintos procesos de diálogo y de acuerdos entre fuerzas políticas, destinados a fortalecer el Estado de derecho. Quiero desde aquí hacer un reconocimiento a todos los servidores del Estado de derecho, en su tarea, en la que han realizado y en la que realizan en estos momentos. Seguir leyendo ...

Pasadas ya las doce de la noche, escribo este comentario tras asistir a una interesante propuesta de la Fundación Bernardo Aladrén, a saber, una jornada de trabajo en el que diferentes actores y testigos de lo que acontece en el País Vasco han planteado, y confrontado con el público asistente, sus propuestas sobre el futuro del País Vasco.

La primera ponencia de la tarde —no he podido asistir a las de la mañana— ha reflejado la profunda división existente en la sociedad civil vasca. Así, las bienintencionadas propuestas de Paúl Ríos, coordinador de Lokarri, se contraponían al discurso de Joseba Arregui, presidente de Aldaketa y ex consejero del gobierno vasco.

Arregui, con el que he tenido la oportunidad de hablar en privado durante un buen rato, ha basado su discurso en tres ejes fundamentales: las víctimas, el lenguaje y negociación. En relación al primer punto, ha pedido respeto a las víctimas cuya memoria, ha dicho, debería preservarse. Del lenguaje baste decir que ha renunciado expresamente a mencionar la palabra 'paz' porque —así lo entiende— aquí no hay un guerra. Se ha declarado a favor de la negociación pero sólo para tratar de la desaparición de ETA y rechaza el derecho de autodeterminación como fórmula para solucionar los problemas del País Vasco.
En cuanto a Paúl Ríos, ha adoptado desde el primer momento una actitud defensiva acusando incluso a los que formulábamos preguntas de malinterpretar sus opiniones. Ha defendido un gran acuerdo de todos los grupos políticos, la necesidad de una consulta popular, la constitución de una mesa política en la que estuvieran representadas todas las sensibilidades y la reconciliación como métodos para solucionar el 'problema vasco'. Sus propuestas partían de las premisas de "no violencia" y "Derechos Humanos". Escrito así podría parecer laudable pero lo que subyacía en su mensaje era una perfecta "equidistancia" entre los asesinos y los demócratas. Poner, por ejemplo, al mismo nivel la legítima violencia ejercida por el Estado para defender a sus ciudadanos  —detener a un asesino para que sea juzgado— y la de los etarras da idea de por dónde camina el discurso: el mismo por el que discurre el de Batasuna.
La segunda ponencia trataba sobre el papel de los medios de comunicación durante la negociación. Ambos ponentes, Emilio Alafaro —Subdirector de "El País" en el País Vasco— y Pedro Ontoso —subdirector de "El Correo"— han expresado parecidas conclusiones: honestidad, responsabilidad, precaución, ... en el ejercicio de la profesión periodística, especialmente ahora, por todo lo que la sociedad española se juega en el envite. A pesar de estar ya fuera de tiempo, he tenido la oportunidad de preguntar: si durante la negociación con ETA consiguieran el documento sobre el que se trabaja, ¿lo publicarían? Pedro Ontoso ha respondido afirmativamente; Emilio Alfaro, sin embargo, ha introducido dos reflexiones. La primera sobre el perjuicio que podría propducir tal publicación. La segunda, sobre un supuesto incumplimiento del gobierno de sus promesas respecto a la negociación. En el primer caso, valorarían las consecuencias de hacer público el documento. En el segundo, lo publicarían siempre.

Hasta aquí el resumen de lo acontecido aunque, a decir verdad, no hace justicia a todo lo que en el Centro de formación "Arsenio Jimeno" se ha dicho y comentado. Mi más sincera enhorabuena a los organizadores.

Esta mañana el presidente del Gobierno, Rodríguez Zapatero, ha anunciado por sorpresa una remodelación de su gabinete. Bono, el ministro de Defensa, deja su puesto al hasta hoy minsitro de Interior, José Antonio Alonso. Su cartera la ocupará Pérez Rubalcaba. En Educación, Mercedes Cabrera sustituye a San Segundo

Las causas de esta crisis se encuentran probablemente en las divisiones internas a cuenta del recién aprobado Estatuto de Cataluña —aunque Bono lo niegue— y, especialmente, la negociación con ETA. Rubalcaba tiene un perfil más político que Alonso pero, desde mi punto de vista, es el menos indicado. De él se puede esperar todo excepto transparencia y juego limpio. La promesa formulada por Zapatero en el sentido de no pagar un 'precio político' no contaba, hasta ahora, con argumentos en contra pero con este nombramiento se han encendido todas las alarmas. Espero equivocarme.

Intervención del secretario general del PP tras su reunión con Zapatero para abordar el alto el fuego permanente de ETA [Vía PP]:
Muy buenos días y gracias por su asistencia.

Le he ofrecido al presidente del Gobierno mi apoyo y el de mi partido para acabar con ETA. Quiero que los españoles sepan que este apoyo, que es mío y de mi partido, no tiene apellidos ideológicos ni partidistas. El final de ETA era un objetivo que todos hemos apoyado en la calle con nuestra movilización social y con nuestra exigencia de que el terrorismo desaparezca.

Quiero, por tanto, reafirmar que mi posición y la del Partido Popular no tiene otras referencias que las exigencias de la democracia constitucional, de lo que han expresado los ciudadanos en las ejemplares movilizaciones sociales que se han producido y de los derechos de las víctimas a la dignidad, a la memoria y a la justicia. Seguir leyendo ...

Colaboraciones: Wifredo Espina. Periodista y ex director del Centre d’Investigació de la Comunicació. Generalitat de Catalunya.

¿Democracia de ETA y democracia de la Constitución?

En el fondo de lo que se llama “nuevo escenario” creado por el gesto de ETA hay un choque frontal. Ahora político-jurídico, que afortunadamente parece destinado a sustituir al de la violencia. Ya es un paso importante este cambio de terreno de juego, siempre que se confirme que va en serio y que detrás no seguirán estando intactas las pistolas –como están- tutelando las demandas etarras en una posible negociación. El choque, o enfrentamiento, en este caso sería incruento –¡ojala!, sin víctimas-, pero seguiría, o seguirá, siendo radical. Seguir leyendo ...

  • ¿Qué se debe? Por Fernando Savater, catedrático de Filosofía de la Universidad Complutense de Madrid (EL PAÍS).
  • Una paz sin pelotazos políticos. Por Daniel Innerarity, profesor de Filosofía en la Universidad de Zaragoza, es premio nacional de Ensayo 2003 por su libro La transformación de la política y premio Espasa de Ensayo 2004 por La sociedad invisible (EL PAÍS).
  • Consejos vendo... Por Jon Juaristi (ABC).
  • El reconocimiento de la derrota. Por Javier Pérez Royo, catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad de Sevilla (EL PERIÓDICO).

Declaración de Euskadi Ta Askatasuna a Euskal Herria

ETA, organización socialista revolucionaria vasca de liberación nacional, desea mediante esta Declaración dar a conocer la siguiente decisión:

Euskadi Ta Askatasuna ha decidido declarar un alto el fuego permanente a partir de las 00:00 horas del 24 de marzo de 2006.

Reflexión de ETA

El objetivo de esta decisión es impulsar un proceso democrático en Euskal Herria para que mediante el diálogo, la negociación y el acuerdo, el Pueblo Vasco pueda realizar el cambio político que necesita.

Superando el actual marco de negación, partición e imposición hay que construir un marco democrático para Euskal Herria, reconociendo los derechos que como pueblo le corresponden y asegurando de cara al futuro la posibilidad de desarrollo de todas las opciones políticas.

Al final de ese proceso los ciudadanos y ciudadanas vascas deben tener la palabra y la decisión sobre su futuro, dando así una solución democrática al conflicto.

ETA considera que corresponde a todos los agentes vascos desarrollar ese proceso y adoptar los acuerdos correspondientes al futuro de Euskal Herria, teniendo en cuenta su pluralidad y totalidad.

Los Estados español y francés deben reconocer los resultados de dicho proceso democrático, sin ningún tipo de injerencias ni limitaciones. La decisión que los ciudadanos y ciudadanas vascas adoptemos sobre nuestro futuro deberá ser respetada.

Llamamiento de ETA

Hacemos un llamamiento a todos los agentes para que actúen con responsabilidad y sean consecuentes ante el paso dado por ETA.

Es tiempo de compromisos. Todos debemos asumir responsabilidades, para construir entre todos la solución democrática que el Pueblo vasco necesita. Es el momento de tomar decisiones de calado, pasando de las palabras a los hechos.

ETA hace un llamamiento a las autoridades de España y Francia para que respondan de manera positiva a esta nueva situación y para que no pongan obstáculos al proceso democrático, dejando de lado la represión y mostrando la voluntad de dar una salida negociada al conflicto.

Finalmente, hacemos un llamamiento a los ciudadanos y ciudadanas vascas en general y a los militantes de la Izquierda Abertzale en particular, para que se impliquen en este proceso y luchen por los derechos que como Pueblo nos corresponden.

Compromiso de ETA

ETA muestra su deseo y voluntad de que el proceso abierto llegue hasta el final, y así conseguir una verdadera situación democrática para Euskal Herria, superando el conflicto de largos años y construyendo una paz basada en la justicia. Nos reafirmamos en el compromiso de seguir dando pasos en el futuro acordes a esa voluntad y de seguir luchando hasta lograr los derechos de Euskal Herria.

La superación del conflicto, aquí y ahora, es posible. Ese es el deseo y la voluntad de ETA.
En Euskal Herria, marzo de 2006
Euskadi Ta Askatasuna
E.T.A.