At Mecca Meeting, Cartoon Outrage Crystallized
Para quienes crean que la "guerra de las caricaturas" forma parte de una conspiración judeo-masónica o que simplemente se trata de una guerra cultural o religiosa, tal vez debieran leer el artículo publicado hoy en el New York Times —At Mecca Meeting, Cartoon Outrage Crystallized (PDF)—. En él, sus autores desmenuzan los acontecimientos desde la publicación de las caricaturas por el diario danés Jyllands-Posten hasta los graves incidentes de los últimos días. Se describen, por ejemplo, las andanzas de una delegación de musulmanes daneses por Oriente Próximo, llevando consigo caricaturas ofensivas que no habían sido reproducidas en Jyllands-Posten —una manipulación que también fue denunciada por dicho periódico— y propagando el rumor de una supuesta iniciativa del gobierno danés para prohibir el Corán. En el artículo aparece también un elemento hasta ahora desconocido como es la supuesta orquestación de una campaña anti-occidente aprovechando la publicación de las mencionadas caricaturas, a cuyo frente se situarían Irán y Siria secundados por Arabia Saudí, y que se habría gestado en diciembre pasado con ocasión de la cumbre de la Organización de la Conferencia Islámica. En la declaración final se hace mención expresa de esta problemática que es interpretada como una campaña contra los musulmanes en Dinamarca y en todo el mundo.
Volviendo a Europa, la magistral portada de El Jueves revela, en un solo golpe visual, la víctima de esta "batalla": la Libertad de Expresión. No basta que ésta esté tutelada por el sistema jurídico; también es necesario que no haya temor. ¿Quién se atreverá ahora a criticar al Islam? ¿Y al Dios cristiano? ¿Prohibiremos el carnaval de Cádiz si las chirigotas ofenden a los católicos? ¿Pediremos a Canal+ que elimine de las Noticias del Guiñol los guiñoles del Papa Benedicto XVI y del Obispo de Bilbao? Según nuestro presidente, Rodríguez Zapatero, sí ya que las manifestaciones que puedan ofender a los creyentes deben ser rechazadas «desde un punto de vista moral y político». Pues nada, instauremos de nuevo la censura previa y todos tan contentos.
Actualización. El País se hace eco de la noticia: Los países islámicos coordinaron su repulsa a las viñetas de Mahoma en un encuentro en diciembre (PDF)