El enorme y desigual alcance del desarrollo humano en el mundo queda reflejado en los asombrosos progresos de algunas zonas mientras otras permanecen sumidas en el estancamiento o en un retroceso abismal. El equilibrio y la estabilidad para todo el mundo precisa del compromiso de todas las naciones, ricas y pobres, y de un pacto global para el desarrollo que permita hacer llegar a todas las personas la ampliación de las numerosas posibilidades existentes: Informe Sobre Desarrollo Humano 2003.