El 18 de julio de 1928 se inaugura la estación de Canfranc en presencia del rey Alfonso XIII, el general Miguel Primo de Rivera y el presidente de la República Francesa Gaston Doumergue. De aquella solemne ceremonia solo han llegado a nuestros días las imágenes grabadas por Antonio Tramullas (Inauguración del ferrocarril de Canfranc), que se conserva en la Filmoteca Española,y otra grabación realizada por Charles Pathé que fue descubierta en 2019. La primera no está disponible al público pero podemos disfrutar de la segunda:
Desde aquél lejano año muchos han pretendido enterrarla, pero su epitafio aún no se ha escrito. La lucha de los aragoneses para lograr esta infraestructura arranca el 19 de noviembre de 1853. En esa fecha se firmó el manifiesto «Los aragoneses a la nación española», un documento en el que se pedía por primera vez que se construyera una línea de ferrocarril que uniera Madrid y París a través del Pirineo aragonés. A partir de esa fecha se suceden diversos hechos que culminan con la inauguración de la estación.
En 1970 el descarrilamiento de un tren de mercancías en el lado francés y el posterior derrumbe del puente de L’Estanguet supuso el cierre de la línea. Desde entonces, la lucha —tanto desde España como desde Francia— por abrir de nuevo ese corredor ferroviario no ha cesado y es tal el empeño puesto en ello por nuestros conciudadanos que cada 18 de julio recrean su puesta en marcha. El periódico Heraldo de Aragón le ha dedicado un especial titulado 90 años de trayecto que narra el devenir de este emblemática obra.