Libertad de prensa

Controlar los medios de comunicación ha sido siempre una tentación política. Regímenes represivos sin libertad de prensa llegan a extremos increíbles para silenciar a los periodistas. Los nuevos medios son más difíciles de controlar que los tradicionales, pero también lo es la calidad de lo que publican [Seguir leyendo en el Correo de la UNESCO].

4 comentarios


  1. Tanto en los medios aragoneses como en los de ámbito nacional puede apreciarse sin mayores dificultades la "influencia" de los partidos políticos pero no creo que la libertad de expresión esté amenazada. En las sociedades democráticas la pluralidad de medios es lo que asegura esa libertad. Y las leyes, claro.

    Responder

  2. Creo que confundimos la libertad de expresión o de opinión con la libertad de prensa que, aunque está relacionadas, no es lo mismo. De hecho, la libertad de prensa, si no está sujeta a una ética, puede convertirse en el peor enemigo de la libertad de expresión desinformando a los ciudadanos y polarizando y enfrentando a la población. En España tenemos el ejemplo de los dos periódicos mayoritarios El País y El Mundo cuyas "informaciones" son casi siempre sesgadas y engañosas. El ambiente de crispación de vivimos ha sido primero inventado y después alimentado desde esos medios hasta convertirlo en algo real.

    Otro ejemplo de cómo la libertad de prensa pone en peligro la libertad de opinión lo podemos ver en las amenazas y represión que los medios ejercen sobre sus propios periodistas llegando al despido por no seguir la línea editorial. Y lo peor: no existe ninguna Ley que les impida hacerlo. En estos momentos un periódico nacional podría destrozar la vida de un ciudadano cualquiera sin que por ello haya ninguna responsabilidad civil o penal o mayor castigo que una indemnización económica y unas disculpas (que nunca se producen).

    Salud!

    Responder

  3. Carlos Norberto Mugrabi ( http://doctormugrabi.com.ar ) - 03-05-2008 - 21:37:31h
    Somos injustos al olvidar cuánto le llevó a la civilización lograr el derecho a expresarse. Y aún no se ha alcanzado totalmente. Las libertades deben ser cultivadas en conjunto para que surtan el efecto deseado.

    Responder

Responder a Carlos Norberto Mugrabi Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *