Aunque se puede acceder al ibón de Estanés desde distintos puntos, el recorrido más sencillo, aunque no por ello menos bonito, es el que parte desde el aparcamiento de Sansanet (al lado del Col de Somport), ya en Francia. A diferencia de muchos de nuestros parques naturales, los franceses no pueden llevar a sus perros porque está prohibido su acceso a dichos espacios. Ni siquiera cabe la opción de llevarlos atados. Tampoco se puede acceder con moto o con bici.
Como ya podéis imaginar, nos llevamos una sorpresa al llegar al ibón. No solo una familia estaba acampando en su orilla sino que además les acompañaba este simpático burro.