La Fiesta de los Patios de Córdoba se celebra durante la primera quincena de mayo porque es en esas fechas cuando los patios lucen en todo su esplendor. Esta fiesta se celebró por primera vez en 1921 y sólo participaron tres patios. Debido a esta escasa participación, no volvió a celebrarse hasta 1933. La fiesta casi desaparece con la llegada de la Guerra Civil ya que no se recuperó la tradición hasta 1944. Finalmente, en 1988 se establecieron unas bases claras sobre los aspectos ornamentales que el jurado debía valorar para establecer el patio ganador: variedad floral, cuidado de macetas y arriates e iluminación natural. La fiesta fue inscrita en 2012 en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Sin embargo, merece la pena visitarlos en invierno con ocasión de la Navidad ya que muchos de ellos abren sus puertas para que los visitantes disfruten con los belenes que instalan en ellos. Aunque el sol no los ilumine como en primavera, no pierden su encanto por ello. Siguen invitando a sentarse junto a las flores, relajarse y disfrutar de sus olores.