Sábado, 17 de julio de 2004

Por Juan-José López Burniol, notario (EL PAIS, 17/07/04):

Cierto rigor exige fijar la posición propia antes de criticar la ajena. Por ello afirmo de entrada que, para mí, Cataluña es una nación, esto es, una comunidad con conciencia clara de poseer una personalidad histórica diferenciada y voluntad firme de proyectar esta personalidad hacia el futuro mediante su autogobierno. Un autogobierno que comporta la autorregulación de los propios intereses y el autocontrol suficiente de los propios recursos. Por tanto, no se trata -en palabras de Josep-Maria Bricall- de recrear el pasado, sino de administrar el futuro. En esta línea, la autorregulación de los propios intereses abarca las materias que determinan la calidad de vida de los ciudadanos: sanidad, enseñanza, pensiones, infraestructuras, ordenación territorial y seguridad, y el autocontrol suficiente de los propios recursos constituye el presupuesto sin el que resulta ilusoria cualquier pretensión seria de autorregulación de intereses.…  Seguir leyendo »