El hombre que quería comprar la Torre Eiffel
André Poisson era un hombre cargado de buenas intenciones. Por algo tenía nombre de inocentada, pues nuestro 28 de diciembre es en Francia el poisson d'abril. Sabía que como industrial chatarrero no le sería fácil pasar a la Historia, pero exactamente eso es lo que pretendía. Y cuando, una mañana de la primavera de 1925, fue convocado por el Director General Adjunto del Ministerio de Correos y Telégrafos a una reunión de carácter confidencial en una suite del selecto Hôtel de Crillon de París pensó que su gran oportunidad había llegado.
Otros cinco empresarios del sector asistían a la reunión en la Plaza de la Concordia.… Seguir leyendo »