Sábado, 17 de enero de 2009

Por mucho que el Gobierno dé las culpas a la situación financiera internacional, la crisis española es made in Spain.Cuando España era un país pobre, basó su crecimiento en productos baratos porque los salarios y, por tanto, los costes de producción eran bajos. A medida que crecía, los salarios subían y la competitividad desaparecía. Al no poder competir vendiendo productos más baratos que los demás, España tenía que innovar. Pero nunca lo hizo. En lugar de ello, intentó perpetuar la situación contratando a inmigrantes pobres, cosa que no hacía más que retardar las reformas: gracias a que los inmigrantes aceptaban salarios miserables, las empresas no tenían incentivos para invertir en tecnología o transformarse hacia actividades de mayor valor añadido.…  Seguir leyendo »

Muchos israelíes tienen la sensación de que el mundo (y la historia) se les viene encima en un Estado nacido hace apenas 60 años, al igual que ocurriera a comienzos de junio de 1967, justo antes de que Israel se embarcara en la Guerra de los Seis Días y destruyera los ejércitos egipcio, jordano y sirio en el Sinaí, Cisjordania y los Altos del Golán.

Hace más de 40 años, los egipcios expulsaron a las fuerzas de paz de Naciones Unidas de su frontera en el Sinaí, cerraron el estrecho de Tirán al tráfico marítimo y aéreo israelí, y desplegaron el equivalente a siete divisiones acorazadas y de infantería a las puertas del Estado judío.…  Seguir leyendo »

Guantánamo se ha convertido en un género artístico. También en un vertedero real y al mismo tiempo metafórico por el que se precipitan, en escasos kilómetros cuadrados, los vestigios del comunismo y una base naval de Estados Unidos con todas las reminiscencias neocoloniales. Allí están el terrorismo islamista y las torturas de la democracia liberal. Guantánamo está en el premio Nobel de Literatura (que lo aloja en el discurso de Harold Pinter) y en el León de Oro del Festival de cine de Berlín (que premia Camino a Guantánamo, de Michael Winterbottom y Mat Whitecross). En el arte radical de Banksy (que lo coloca en una parodia de Disney World con su instalación Big Thunder Mountain Railroad) y hasta en el thriller de espías (El afgano, de Frederick Forsyth; El prisionero de Guantánamo, de Dan Fesperman).…  Seguir leyendo »

Más allá de cualquier sofisma, de las provocaciones de Hamás y el lanzamiento de sus cohetes caseros, de cualquier absurda manifestación negando el Holocausto, la invasión de Gaza es una masacre inadmisible. Mucho ha debido degradarse la sociedad israelí, o demasiado odio se le ha inculcado, para que esta locura cuente con el apoyo mayoritario de la población.

Israel considera desde hace años que tiene el derecho de intervenir en los Estados vecinos -ya sea el Líbano, Siria o Palestina-, ampliar sus fronteras y aniquilar a quien se oponga a sus pretensiones o intereses, mientras lo haga bajo el sacrosanto paraguas protector de la lucha contra el terrorismo.…  Seguir leyendo »

Hoy cumple noventa años Antonio Mingote. Ahí lo tienen ustedes, como todos los días, al volver esta hoja. No sé, cuando esto escribo, cuál será su dibujo, en qué dirección apuntará su ingenio, en qué palabras condensará hoy su gota cotidiana de humor y sabiduría. Solo sé que nunca defrauda.

Desde el 19 de junio de 1953, ininterrumpidamente, ha publicado su viñeta en este periódico. Más de cincuenta y cinco años, más de veinte mil dibujos, la mayor parte con su pie. Pongamos, de promedio, de dos a tres líneas por pie y calculemos en extensión de libro lo que eso representa: el escritor Antonio Mingote, el sabio Mingote.…  Seguir leyendo »

Si fuéramos gente seria y no tan frívola, las primeras páginas de los diarios deberían mantenerse durante semanas machacando sobre el mismo tema. Aun a riesgo de que los lectores fruncieran el ceño por falta de costumbre. Me explico. Sucede una catástrofe y ocupa todo nuestro interés. Al siguiente día, permanece la situación catastrófica, pero nuestro interés se reduce en un punto. Al tercer día, la catástrofe está en toda su virulencia, pero nosotros pensamos que los lectores se sentirán cansados del mismo rollo, que debemos aligerarles de la pesadumbre, y cambiar de asunto. La no persistencia de las catástrofes, ya sean naturales o humanas, en el candelabro de lo ineludible, en la parte dominante de los medios de comunicación, permite al poder tomarnos el pelo de la manera más escandalosa.…  Seguir leyendo »

My chronic inability to take non-military baubles seriously means I have no idea whether there is such a thing as an EU medal of valour. There wouldn't be an Italian one, naturally - and if you get awfully affronted by blithe national stereotyping, you should certainly leave this article here - but something wonderful simply must be bestowed upon David Cerny, the Czech artist whose eight-tonne installation, Entropa, was this week unveiled in the atrium of the European Council in Brussels.

Even if you remain oddly resistant to the tractor-beam allure of public art, you are urged to make an exception for this piece.…  Seguir leyendo »

A esta excéntrica más que periférica zona peninsular en la que habita el firmante llegan noticias, confusas, sobre esos dos autobuses de transporte urbano de los que ya disfrutan o disfrutarán los barceloneses. Dicen que uno de ellos luce un cartel en el que se aconseja tranquilidad y despreocupación, pues Dios no existe y mejor dedicarse a disfrutar un poco de la vida. Aseguran las noticias que el otro afirmará, solemne, todo lo contrario, y que mejor vivirla en Cristo, o algo así. No está mal para empezar. Pepsi y Coca-cola se las han visto peores.

Afirman también las noticias que llegan hasta aquí que muchos usuarios han anunciado ya su intención de no subir nunca jamás al autobús considerado blasfemo, el autobús de los ateos.…  Seguir leyendo »

Many Israelis feel that the walls — and history — are closing in on their 60-year-old state, much as they felt in early June 1967, just before Israel launched the Six-Day War and destroyed the Egyptian, Jordanian and Syrian armies in Sinai, the West Bank and the Golan Heights.

More than 40 years ago, the Egyptians had driven a United Nations peacekeeping force from the Sinai-Israel border, had closed the Straits of Tiran to Israeli shipping and air traffic and had deployed the equivalent of seven armored and infantry divisions on Israel’s doorstep. Egypt had signed a series of military pacts with Syria and Jordan and placed troops in the West Bank.…  Seguir leyendo »