Irán, el relojero nuclear
El empeño en presentar la reunión de Ginebra entre el G-6 e Irán (1 de octubre) como un éxito -queriendo verla como un turning point iraní-, no se acomoda con los resultados conocidos. Irán se limita a permitir la inspección de su nueva planta de enriquecimiento de Qom; algo que ya había admitido de antemano, al tiempo que volvía a insistir en su estricto cumplimiento del TNP (que sólo le obligaría a notificar su existencia seis meses antes de la entrada en funcionamiento; lo que todavía no ha ocurrido). A cambio, se le permite incrementar el nivel de enriquecimiento de su uranio hasta el 20% -en un tercer país, para fines médicos-, con lo que se avala de facto lo que ya viene haciendo en sus centrifugadoras de Natanz.… Seguir leyendo »