A favor de la intervención en Libia
La crisis de libia ha vuelto a colocar en la agenda los difíciles dilemas que tiene ante sí la política exterior en los tiempos modernos. ¿Deberíamos intervenir? ¿Lo hacemos por razones morales y también por intereses nacionales? ¿Cómo equilibramos la necesidad de unas medidas que sean fuertes, firmes y bien articuladas con el deseo de no parecer demasiado poderosos y arrogantes, carentes de respeto por los otros y su cultura?
Hay que exponer dos cuestiones preliminares. En el mundo actual, la distinción entre ofensa moral e intereses estratégicos puede ser falsa. No deberíamos hacernos ilusiones: en una región donde nuestros intereses están profundamente comprometidos, no es probable que las consecuencias de que un régimen se vuelva tiránico y masacre a su propio pueblo queden aisladas dentro de sus fronteras.… Seguir leyendo »