Bajo el síndrome del Titanic
Es una triste ironía del destino que Europa y Estados Unidos hayan conmemorado el mes pasado el centenario del hundimiento del Titanic viviendo —unos más que otros, eso sí— bajo los efectos de la peor crisis financiera de los últimos ochenta años. En cierta medida viene a recordarnos que quizás las lecciones que proporcionó esta catástrofe en 1912 no han sido del todo aprendidas.
El Titanic nació como un símbolo del poder de Gran Bretaña y del esplendor del mundo atlántico. El trasatlántico más moderno y lujoso de aquella época intentó también llegar a Nueva York en tiempo récord en su viaje inaugural, pero como todos sabemos, un iceberg se interpuso en su camino provocando su hundimiento y la muerte del 68 por ciento de los que viajaban en él.… Seguir leyendo »