España como problema
La situación política e institucional en que se halla España es penosa. Si queremos formularlo de manera sencilla podemos decir que, en puridad, «no hay dónde mirar». Da igual que hablemos del Tribunal Constitucional, del Gobierno, de los bancos, de los parlamentos, de las cajas de ahorro, de la universidad, del Rey y de la monarquía, de las comunidades autónomas, de los municipios o de las provincias... todo está empantanado, las apariencias de falsos paraísos se nos han desvanecido.
Preciso es decirlo con claridad: tenemos unas instituciones públicas de cartón-piedra y desde ellas, desde su fragilidad, desde su condición de simples sombras constitucionales, es imposible hacer frente a ningún empeño serio.… Seguir leyendo »