Septiembre de 2016 (Continuación)

Semprún no había cumplido los veinte años cuando –ya exiliado con su familia en Francia– fue detenido y torturado por pertenecer a la Resistencia antinazi. Luego fue internado en el campo de concentración de Buchenwald. En el campo de concentración, llevando pegado en su zamarra un rombo de color rojo, de preso político, con una «S» negra de spanier (español), se integró en el PCE. «En cualquier caso, fue en Buchenwald, entre los comunistas españoles de Buchenwald, donde se forjó esa idea de mí mismo que me condujo más tarde a la clandestinidad antifranquista», escribió Semprún en Viviré con su nombre, morirá con el mío.…  Seguir leyendo »

Cada mañana, al ver a la ciudad despertar e incorporarse a la diaria rutina, tomo consciencia de lo aislados que estamos como ciudadanos del deber con la democracia y su fortalecimiento. La interpretación de un gobierno democrático se ha devaluado al extremo de suponer que el hecho de votar sea el eje principal y único para considerar a cualquier régimen como merecedor de ese calificativo.

La democracia hoy no debe ser concebida como una prolongación de las enseñanzas grecoromanas, mucho menos justificarla por el sólo hecho del sufragio popular. La verdadera democracia es más, es el resultado de la fusión de dos vectores sociales que permiten una convivencia pacífica y una justicia respetada.…  Seguir leyendo »

Cuando la marea sube, todos los barcos suben con ella, pero cuando baja algunos bajan más deprisa. El aumento de la desigualdad en la distribución de la renta resulta mucho más patente en periodos de recesión. Y esto es preocupante, porque reduce el crecimiento futuro, provoca inestabilidad política y reacciones viscerales más que racionales y erosiona las instituciones.

Y, sobre todo, porque afecta a las expectativas de los ciudadanos, que se sienten engañados. Muchos de la llamada clase media española pueden decir ahora: «Hicimos lo que nos habían dicho que debíamos hacer: estudiamos una carrera, creamos una familia, compramos nuestra casa, pusimos esfuerzo e ilusión...…  Seguir leyendo »

Australia’s Gulag Archipelago

In 2009, 5,609 people traveled to Australia in tiny cramped boats, seeking refuge. By 2012, it had rocketed to 25,173. Kevin Rudd, the prime minister at the time, vowed that no one who tried to get here by sea would ever be allowed to settle. The opposition party successfully ran on a slogan of “Stop the Boats” in the next election, and by 2014-15, the numbers were down to 158. Now it is virtually zero. And the success of this approach has meant the number of people in detention more generally has plummeted: in 2013 there were almost 2,000 children in onshore and offshore detention; now there is little more than a hundred.…  Seguir leyendo »