La hora de hacer política
La única ley ley que parece sobrevivir tras las elecciones presidenciales en EEUU es la de Murphy: todo lo que puede empeorar, empeora. Contra todo pronóstico, los norteamericanos han hecho presidente de la nación más poderosa del mundo a un tipo que proclamó que el proceso electoral estaba trucado y que llegó a afirmar que sólo reconocería el resultado si él ganaba o si su oponente le superaba por una mayoría abrumadora. Lo que, a la vista de los resultados (Clinton obtuvo 230.053 votos más que él), le llevará a considerarse un presidente elegido con trampas y sin el apoyo suficiente como para que le sea reconocida su victoria.… Seguir leyendo »