A las cinco de la tarde
Mi liberada:
Nada ha tenido en España tan buena prensa como el nacionalismo y, en especial, el nacionalismo catalán. De un modo sostenido. Durante cuatro décadas el nacionalismo ha sido el punto de vista correcto y moderno de las cosas. Ni siquiera la actividad asesina de los terroristas vascos pudo desprestigiarlo. Casi al contrario: como hoy a los islamistas, también a los nacionalistas desarmados se los protegía de las fobias. La idea -sorprendente- es que el nacionalismo era la única cura posible del nacionalismo. En 1984 el diario Abc designó a Jordi Pujol Español del Año, pero eso solo fue la anécdota de una categoría mucho más vasta.… Seguir leyendo »