Una nueva ciencia para otra era
Aprovechando unas vacaciones, William Perkin llevó a cabo algunos experimentos químicos en el laboratorio que había construido en su apartamento de Londres. Pocos días después, hizo uno de los descubrimientos más importantes de su época, la síntesis del primer colorante artificial. Apenas tenía 18 años. Consciente de la importancia de su hallazgo, lo patentó y construyó una fábrica con el dinero que le dio su padre. Poco después, la reina Victoria, y con ella buena parte de la aristocracia europea, lucían el intenso color morado que había inventado William. Con sólo 23 años, nuestro joven científico y emprendedor creó las bases de la nueva industria de los colorantes artificiales y ayudó a consolidar el liderazgo del Reino Unido en el sector textil.… Seguir leyendo »