Para que sirva y enamore
La Constitución, afirmó el Rey Felipe VI en su alocución del pasado día 23 de diciembre, "no es una realidad inerte, sino una realidad viva que ampara, protege y tutela nuestros derechos y libertades".
Es una "Constitución viva" entendida como "el modo en que una determinada Constitución escrita es concretamente interpretada y actuada en la realidad política" (R. Guastini). Es la Constitución "vivida" por los poderes; los que garantizan su cumplimiento y sancionan sus incumplimientos. Y, aún más importante, la vivida por los ciudadanos.
Los ciudadanos han de vivir y sentir lo que supone que la Constitución afirme que "España se constituye en un Estado", al que le atribuye unos rasgos (social y democrático de Derecho), a la par que proclama que debe servir, como su ordenamiento, a unos valores "superiores" (señas de identidad del liberalismo progresista): los de la libertad, la justicia, la igualdad y el pluralismo político (artículo 1).… Seguir leyendo »