La democracia de los peores
Todos o casi todos coincidimos en que no está bien mantener relaciones sexuales con un pollo muerto y en que la democracia es buena cosa. En lo que no estamos tan de acuerdo es en por qué. En el primer caso, a poco que se pongan a pensar, sí que encontrarán alguna coincidencia, una emoción compartida, la repugnancia, fundamental a la hora de explicar muchas valoraciones morales. El acuerdo resulta más complicado en el caso de la democracia. Para algunos la democracia es un sistema de penalización, elecciones mediante, de los malos gestores; para otros, un modo de resolver conflictos sin partirnos la boca, por mayorías.… Seguir leyendo »