Cuando MacGuffin se adueña de la escena
Perdonen mi malasombra, pero los sueños no son verdad. Con frecuencia, en la política como en la vida, no tienen más sostén que la ingenuidad de unos y, ay, las mentiras o las cobardías de los otros. Traigo la mala noticia porque veo a muchos bienintencionados fantaseando con la gran coalición, un acuerdo de gobierno entre los grandes partidos para hacer frente a la crisis y al nacionalismo. Lo siento, pero la gran coalición nunca será. Mejor darnos por enterados cuanto antes.
Algunos achacan la imposibilidad del pacto a nuestro ancestral encanallamiento. Los españoles somos así. Caínes sempiternos. Un recurso cultivado por cierta literatura académica, nacionalista a su pesar, bastante plomiza, acostumbrada a invocar en sus explicaciones alguna variante, más o menos camuflada, de las esencias nacionales.… Seguir leyendo »