La capital y el capital
«Madrid nao ten nada!», me decía un amigo lisboeta mientras contemplábamos el cabrilleo del sol poniente en las aguas del estuario de Tajo, al que los locales llaman mar da palha, mar de paja, por los reflejos dorados del sol en el agua. Al menos, me decía condescendiente, Barcelona también tiene mar. Tuve que reconocer que en Madrid no teníamos nada como aquel bello panorama y que, en materia de agua visible, los madrileños nos contentábamos con el Manzanares, «arroyo aprendiz de río» según Quevedo. Y, sin embargo, en Madrid no ha escaseado nunca este elemento, como indica su propio nombre que, según Oliver Asín, deriva del latín arabizado, y significa «manantial»: Fons Matrix (Fuente Matriz), que luego se transformó en Mayrit y finalmente en el topónimo capitalino.… Seguir leyendo »