Un servicio de inteligencia es una institución pública, al servicio del Estado democrático de derecho, cuyas misiones emanan del Ejecutivo para contribuir, con sus procedimientos especiales, a la necesaria seguridad nacional, sin la que la vida de la sociedad se torna frágil e inestable. El Gobierno de turno impulsa su actividad, controla el resultado de sus cometidos y legaliza sus actuaciones, siempre conforme a derecho; si hubiera otros organismos que pudieran realizar las funciones de los servicios de inteligencia, estos dejarían de ser necesarios y desaparecerían.
Al reciente cese de la directora del CNI, Paz Esteban, ha seguido como consecuencia, al parecer, de forma directa e inmediata, la modificación de las misiones de vigilancia de nuestro servicio de Inteligencia nacional (CNI) a los impulsores y entorno del reciente golpe de Estado separatista en Cataluña, si se interpretan las informaciones disponibles, también aparecidas en prensa; esta posible decisión, grave por su significado, tendría un mayor alcance en lenidad si como es público y notorio aquellos responsables del golpe de Estado y proclamación de una 'república catalana', han aseverado solemnemente que «lo volveremos a repetir», han mantenido el refugio en Bélgica del mayor responsable de aquellos actos, desde donde alienta internacionalmente esas posibilidades, y establecidos contactos, al parecer, con servicios de inteligencia hostiles a España, en especial los rusos, aspecto este último que no es un caso aislado en la estrategia del presidente Putin de disgregar Europa, para lo que sus regiones más significativas ofrecen un blanco apreciable.… Seguir leyendo »