Todos somos negacionistas
Cada año, cuando comienzo mis clases de Filosofía de la Ciencia, defiendo la teoría geocéntrica; ya saben: la Tierra, en el centro del sistema solar. Apelo, naturalmente, al sentido común: cada mañana vemos al sol desplazarse por el firmamento; los objetos caen hasta su lugar natural, abajo, donde nosotros estamos, el centro; si nuestro planeta se desplazara, experimentaríamos un viento lateral que haría algo más que despeinarnos; y cosas parecidas. Sin darles tiempo a reponerse de la sorpresa, si es que llegan a experimentarla, me arranco con una apología del terraplanismo.
Por supuesto, después aclaro que yo creo en la teoría heliocéntrica y que la Tierra es, más o menos, esférica.… Seguir leyendo »