La derrota del 'no es no'
El 'no es no' que Pedro Sánchez enarboló ante las bases del PSOE en las primarias de 2017 ha sido uno de los principios reguladores de la política española desde su acceso al poder con la moción de censura del año siguiente. El sectarismo hacia la derecha y la polarización estratégica, con el consiguiente vaciamiento de la centralidad, han sido el combustible emocional para superar de un solo golpe los escrúpulos que siempre han separado a su partido del populismo de los indignados y del independentismo disolvente.
Como escribía David Jiménez Torres en una columna del último verano, se instaló «una impostura» que «consistía en pretender que la división entre defensores e impugnadores de la Constitución era menos relevante que la división entre izquierdas y derechas».… Seguir leyendo »