Las siglas soy yo
Nicolás Redondo Terreros encarna como nadie la vieja disquisición entre la moral política y el pragmatismo resuelta en favor de la primera. Su imagen en el Kursaal de San Sebastián aquel 28 de abril de 2001, cogido de la mano de Fernando Savater y este a su vez de la de Jaime Mayor Oreja, los tres frente a un escenario que recreaba el asesinato del columnista de EL MUNDO José Luis López de Lacalle -el paraguas abierto y el fajo de periódicos en el suelo-, es un icono de los consensos constitucionales en torno a una idea cívica de España compartida por las dos fuerzas vertebradoras del Estado.… Seguir leyendo »