Mi hijo fue asesinado porque soy jueza federal
“Sigamos hablando; me encanta hablar contigo, mamá”. Esas fueron las últimas palabras que me dijo mi único hijo, Daniel, cuando limpiábamos el sótano después de sus festejos de cumpleaños. Todavía estaba muy feliz debido a un glorioso fin de semana en casa con sus padres y amigos.
Entonces sonó el timbre de la puerta. Daniel subió apresuradamente las escaleras. Segundos después, mientras yo estaba sola en nuestro sótano, mi amado hijo fue asesinado a balazos. Mark Anderl, mi esposo desde hace 25 años, recibió tres disparos y resultó gravemente herido.
Esta tragedia, la peor pesadilla de toda madre, ocurrió por una razón que no tiene nada que ver con mi esposo ni con mi hijo, sino más bien con mi trabajo: soy una jueza de distrito de Estados Unidos.… Seguir leyendo »