Buscador avanzado

Nota: la búsqueda puede tardar más de 30 segundos.

La Policía antidisturbios afuera del edificio del Congreso en Ciudad de Guatemala, el 21 de noviembre de 2020. (AP Photo/Oliver De Ros)

No es sorprendente que América haya sido la región más afectada por la pandemia de COVID-19. Los graves problemas de derechos humanos por los que ya atravesaba el continente crearon tierra fértil para que eventualmente se convirtiera en el epicentro del nuevo coronavirus.

El impacto de la pandemia no solo se siente por los más de 29 millones de casos y 750,000 muertos que se han registrado, sino también por las consecuencias inmediatas y futuras con relación al ejercicio de derechos humanos, sobre todo de grupos históricamente marginados como los pueblos indígenas y afrodescendientes, las mujeres y niñas, y las personas migrantes y refugiadas, entre otros.…  Seguir leyendo »

Dos hombres cargan un ataúd frente al Palacio Nacional, en Ciudad de México, al finalizar una protesta el 11 de mayo de 2020, en la que activistas de derechos humanos buscaron llamar atención a los riesgos de salud que enfrentan las personas en cárceles mexicanas esperando juicios que quedaron estancados por la pandemia por coronairus. (Rebecca Blackwell)

Algunos gobiernos alrededor del mundo están usando la pandemia para afirmar que los derechos humanos son un lujo que no nos podemos permitir. Usando la crisis como pretexto, están arrestando a sus críticos, intensificando la vigilancia y tomando amplios poderes de emergencia. La presunción subyacente es evidente: proteger los derechos humanos es un mero detalle que debe ser descartado cuando las cosas se ponen difíciles.

Sin embargo, la pandemia ha resultado ser también una oportunidad para promover los derechos humanos, no solo por una cuestión de principios sino también por razones pragmáticas. La crisis ha demostrado que las autoridades que ignoran los derechos humanos ponen en peligro nuestra salud.…  Seguir leyendo »

Human rights activists prepare for a car caravan protest through downtown Los Angeles to call on officials to release inmates from jails to prevent the spread of coronavirus on April 7. (Robyn Beck/Afp Via Getty Images)

Some governments around the world are using the pandemic to claim that human rights are a luxury we cannot afford. With the crisis as a pretext, they are arresting critics, intensifying surveillance and seizing broad emergency powers. The underlying assumption is clear: Safeguarding human rights is a nicety that must be jettisoned when times get tough.

In fact, though, the pandemic has also turned out to be an opportunity to promote human rights — not only as a matter of principle but also for reasons of pragmatism. The crisis has shown that officials who ignore human rights jeopardize our health, while respecting human rights is the best public health strategy.…  Seguir leyendo »

Europa y su espejo roto

Europa, con más de un millón de casos de personas contagiadas por el coronavirus, ocupa portadas mundiales por una pandemia que, reconozcámoslo, nunca pensamos que llegaría a nuestras puertas. Pero ese viejo continente, que otrora presumió de fundar sobre los Derechos Humanos su sistema político y social, no solo peligra por un virus.

Más allá del coronavirus, deberíamos estar hablando de todas las amenazas al ejercicio de los derechos humanos en la región, como por ejemplo, involución del derecho a la libertad de expresión prácticamente en todos los países, con graves situaciones en Croacia, Bosnia Herzegovina o Serbia, donde los ataques por parte de miembros del Gobierno, incluido el Presidente, amenazaban a los periodistas incluso con procedimientos legales contra ellos.…  Seguir leyendo »

States of emergency, such as wars, natural disasters and pandemics, have historically been fertile breeding grounds for human rights abuse. That’s exactly what we’re now seeing in Iran, the epicenter of covid-19 in the Middle East. The pandemic has caused thousands of deaths and brought its leadership’s incompetence, corruption and oppressive rule into plain sight. Yet the covid-19 threat is also laying bare the government’s continuing contempt for human rights.

The situation was already dire before the pandemic came along. In November 2019, about 1,500 Iranian protesters were reportedly killed by state security forces and thousands more imprisoned. Iranians mourned again in January, when security forces launched a missile that shot down a Ukrainian passenger plane, killing 176 people.…  Seguir leyendo »

«Dios y el pueblo son la fuente de todo poder (…) Yo lo he tomado, y qué diablos, lo conservaré para siempre». Lo dijo François «Papa Doc» Duvalier en 1963. Y es lo que hizo: siguió siendo presidente de Haití hasta su muerte en 1971, momento en que lo sucedió su hijo, Jean-Claude («Baby Doc»), que extendió la dictadura otros quince años.

Puede parecer historia antigua, pero no lo es para mí. Mi familia es haitiana, y aunque inmigramos a Estados Unidos durante mi infancia, siempre pareció que seguíamos al alcance del cruel régimen de los Duvalier. Nunca olvidé las enseñanzas brutales que aprendieron los haitianos bajo los Duvalier, incluido el hecho de que habitualmente usaban desastres naturales y crisis nacionales para reforzar su dominio.…  Seguir leyendo »

Le 20 mars, la libération de Roland Marchal, «prisonnier scientifique» en Iran depuis le 5 juin 2019, a confirmé le cynisme de la République islamique, ou tout au moins celui des acteurs qui en ont pris le contrôle au-delà de leurs prérogatives constitutionnelles. Comme le laissaient entendre les diplomates iraniens à mots de moins en moins couverts, sa détention était bien une prise de gage pour obtenir le renvoi en Iran de l’ingénieur Ruhollahnejad, arrêté en France sur mandat international émis par les Etats-Unis. Et comme la France n’avait sans doute plus de monnaie d’échange sous la main, Fariba Adelkhah, anthropologue de Sciences Po arrêtée en même temps que Roland Marchal (et à laquelle l’Université de Genève vient de décerner un doctorat honoris causa), reste en prison sine die.…  Seguir leyendo »