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Los inexistentes escrúpulos de José Zaragoza

Igual que el columnismo es un género rotundamente español, el político cantamañanas es algo muy nuestro. Tanto, que hay que quererlo como presumimos, por ejemplo, de La Alhambra. Tenemos a Cervantes y tenemos, desde que Twitter democratizó la estupidez, cantamañanas en el Congreso capaces de hundir la reputación de un país nada más levantarse. ¡Me encanta el olor de la inteligencia saltando por la ventana!

A esa larga tradición española en la que se encuentran Gabriel Rufián, Arnaldo Otegui o Pablo Iglesias viene a sumarse ahora José Zaragoza.

Es normal que el lector no sepa ni quién es porque casi nadie en España lo conocía hasta ayer.…  Seguir leyendo »

A Ruba

Hace un año, el 29 de abril, recibí temprano una llamada de Alfredo preguntándome si podríamos vernos ese día, antes de mi salida para Buenos Aires al día siguiente. Él tenía que viajar a República Dominicana para unas conferencias, invitado por un ministro amigo suyo, y quería saber mi opinión sobre la situación política en aquel país. Temía que no tuviéramos ocasión de vernos entre mi vuelta de Buenos Aires y su salida a República Dominicana. Además, me dijo, tenía cierta urgencia en hablarme del tema de la mediación en la crisis de Venezuela, de los que habían intervenido en el final de ETA.…  Seguir leyendo »

El coronavirus se ha llevado otro gran amigo. Ya son muchos. Demasiados. En medio de este drama a quienes sobrevivimos nos queda la satisfacción y el agradecimiento por la vida de algunas personas excepcionales a las que hemos tenido la suerte de querer y de ser queridos por ellas. Enrique Múgica Herzog lo es sin duda para los muchos que tuvimos el privilegio de disfrutar de su amistad.

«La pandemia del Covid-19 nos ha despertado bruscamente del peligro mayor que siempre han corrido los individuos y la humanidad: el del delirio de omnipotencia». El sábado me llegó el puñal de la noticia de su muerte al tiempo que oía estas sabias palabras.…  Seguir leyendo »

Solía Contar Nicolás Redondo Urbieta cómo, a mediados de los años 60, cruzó a Francia una noche, atravesando un vado del Bidasoa, para mantener una reunión con miembros de la dirección del PSOE en el exterior. Le acompañaba un joven abogado donostiarra, recién incorporado a su partido. Aquel chico, que ya había conocido la cárcel pero no el paso clandestino de la muga, se descalzó antes de entrar en el río, cuyo caudal venía bajo por el estiaje. Al llegar a la orilla francesa le sangraban las plantas de los pies, destrozadas por las piedras del lecho fluvial. Nicolás, que, cinco años mayor y con algo más de experiencia en aquellas lides, no se había quitado las alpargatas y se mantenía incólume, tuvo que cargar con él a cuestas hasta el lugar de la cita.…  Seguir leyendo »

Químico del poder

Adicta a los artículos, que suelen ser definitivos, de doña Almudena Grandes, no se te escaparía el último, analítico, sobre el resultado electoral. Pero, por si acaso, voy a reproducirte su párrafo esencial, a pesar de que escoger no ha sido tarea fácil: "Aunque a Casado y Rivera no les entre en la cabeza, los pactos que incluyan a nacionalistas o independentistas serán igual de bienvenidos, hasta de aplaudidos, por los votantes de todas las fuerzas que pacten, ya sean grandes o pequeñas. Y si los líderes independentistas catalanes son condenados, ocurrirá lo mismo con los indultos. Millones de españoles, dentro y fuera de Cataluña, respiraremos con el mismo alivio cuando los soliciten y los obtengan del Gobierno central porque, a partir de ese día, podremos recuperar el horizonte de la convivencia".…  Seguir leyendo »

España se descomponía. Era una realidad. La guerra con Estados Unidos dejaba al descubierto un régimen envejecido, el de la Restauración, que comenzaba a debatirse entre la extinción y la regeneración.

Las fórmulas para insuflar vida a la monarquía constitucional, o para quitarla de en medio, se alargaban en artículos y ensayos, en conferencias y discursos institucionales. Era la conciencia y el espíritu que se acabaron asentando, de que debía haber una transformación de abajo arriba, de arriba abajo, que pusiera en su sitio al pueblo español sin que dejara de serlo. Grandes ideas con políticos pequeños. Y como si de una maldición se tratase, los grandes hombres, esos mismos, se quiera o no, que marcan el rumbo, ya no estaban; y los que quedaron no pudieron.…  Seguir leyendo »

Un socialista no puede recordar a Enrique Tierno Galván sin hacerlo con emoción y orgullo, un madrileño tampoco, pues su estela ejemplar como alcalde, como político, intelectual, ciudadano, y hombre se sigue manteniendo a pesar del paso del tiempo, que termina dejando todo en el olvido.

Don Enrique, como le gustaba que le llamaran en muestra de esa hidalguía castellana de la que hacía estandarte -lo de Viejo profesor era el cariñoso apelativo de aquellos que en un ejercicio de sana envidia le admiraban por ser un docente, un pedagogo de la vida en todo- es una imprescindible referencia para entender lo que es hoy Madrid y lo que significó el paso de la dictadura a la democracia.…  Seguir leyendo »

Cuando se murió José Avello, a mediados de febrero, me conjuré para dedicarle un artículo. Había escrito en el 2000 una novela larga y desencantada, que imagino ya estará fuera de los anaqueles. Era asturiano de Cangas del Narcea, pero ni hablé ni me carteé con él jamás. Aseguran que la gente de Cangas del Narcea es muy especial, baste decir que su fiesta por excelencia se denomina la Descarga: un ejercicio de pólvora que explota en breves minutos y que consume toneladas de explosivos, mientras la gente llora de emoción.

José Avello, apenas una necrológica en algún diario señalando su condición de profesor en Madrid y cuyo hecho más notorio en la vida había sido construir una novela, insólita, con los personajes y los ambientes del Oviedo de la transición en decadencia, que se dedicaban a liquidar las exiguas fortunas familiares, comer bien, por supuesto, e iniciar unas partidas de billar interminables, aderezadas con una tortilla de patata a la que no le faltaran unos boquerones para adornar.…  Seguir leyendo »