Buscador avanzado

Zuloaga en una fea época

Sé que buscar una virtud en el nacionalismo catalán puede sonar a provocación en estos días, pero aún así me arriesgaré, dentro de los justos límites y la aconsejable prudencia, a señalar como signo curiosamente positivo de éste su capacidad para acabar reconociendo y adoptando como propios a los artistas e intelectuales que le fueron reacios. Es verdad que lo hace cuando éstos ya han muerto, pero lo hace. Y eso ya es un hecho a valorar en contraste con otros sectarismos políticos que hoy pasan por moderados. Dos ejemplos ilustrativos de lo que digo son Josep Pla y Salvador Dalí.…  Seguir leyendo »