Fiscalidad, ética y justicia
De modo intermitente se escuchan voces que sugieren una amnistía fiscal como forma de incorporar a la economía el dinero que en su día se refugió fraudulentamente en lugares ajenos al control de la Hacienda Pública. La razón aparenta ser obvia: la falta de liquidez de que adolecen las empresas requiere reintegrar a los circuitos normales de financiación la tesorería que en su momento salió de los mismos. Es cierto que no concederles una amnistía acentúa sus dificultades financieras. Sin embargo, contra el fraude no pueden existir treguas sin menoscabar la credibilidad de un Estado de derecho. Cuestión distinta es habilitar mecanismos legales para que quienes defraudaron puedan regularizar voluntariamente, con plena seguridad jurídica, su situación tributaria.… Seguir leyendo »