Antonio Pérez Henares (Continuación)

Zapatero, cuyas intenciones pudieron ser otras pero cuyos hechos lo señalan como el más nefasto presidente de la democracia española, en lo económico nos llevó hasta el abismo, en lo territorial desató al separatismo cuestionando él mismo la Nación que gobernaba, añadió a ello la siembra del odio político entre los españoles. Su torticera y revanchista Ley de Memoria Histórica fue el germen de lo que ahora ya cabalga y se exhibe como objetivo central, compartido gozosamente por la izquierda extrema y el separatismo: la destrucción del principio esencial de la Transición, la Reconciliación Nacional y tras ello proceder a la voladura de los cimientos que han enmarcado y propiciado los 40 de libertad y progreso, la Constitución del 78.…  Seguir leyendo »

Forma parte de la más honda raíz hispana un gen masoquista que parece inducirnos a la asunción de todas las culpabilidades históricas universales y a la expiación de tan atroz mancha colectiva a base de zurriagazos y flagelaciones expiatorias por todos nuestros pecados nacionales. Alcanza en ocasiones tal frenesí que lleva a algunos, bastantes, a abjurar de su propia identidad, y a que cualquier señal de pertenencia les resulte insoportable y que el mismo nombre que nos identifica les queme de tal manera en la boca que les resulte el peor de los sacrificios pronunciarlo. Oigan a los políticos, antes zurdos ahora todos, y toda ristra de declamantes públicos y comprobarán que España ya ha dejado de llamarse así para pasar a ser mentada como «Estepaís» y nosotros, «estepaisinos» porque antes que españoles es mejor, por lo visto, que te llamen cualquier cosa.…  Seguir leyendo »