Los iraquíes no pierden la esperanza
Ya pasaron diez años desde el derrocamiento de Saddam Hussein, que se produjo después de más de tres décadas de tiranía. Tras la caída de Saddam, los iraquíes soñaron construir un nuevo Irak, próspero y democrático. Había un deseo casi unánime de un país en paz consigo mismo y con sus vecinos, y de una constitución que defendiera los derechos humanos básicos y el estado de derecho.
Pero Estados Unidos y sus aliados, sin una visión coherente del futuro de Irak, y mucho menos una política razonable para la etapa posterior a Saddam, declararon a Irak país ocupado y encargaron su conducción a un administrador designado por Estados Unidos, que al poco tiempo decidió desmantelar todas las instituciones de seguridad, militares y de prensa existentes.… Seguir leyendo »