Basilio Baltasar

Este archivo solo abarca los artículos del autor incorporados a este sitio a partir del 1 de diciembre de 2006. Para fechas anteriores realice una búsqueda entrecomillando su nombre.

¿A qué hora debe morir un hombre? Por grande que sea la curiosidad que nos lleva a hurgar en el destino, la mayoría de nosotros preferiría no saberlo. Felizmente consolados por esta santa ignorancia, que tanto nos ofende, vivimos como si tal cosa o nos comportamos como si esto fuera a durar siempre.

Pero hay hombres para los que la muerte no es una contrariedad que valga la pena tener en cuenta. Aunque supieran cuándo y cómo, dónde y a qué hora, su estilo confundiría a la mortalidad que acecha a la vuelta de la esquina y su desbordada vitalidad seguiría siendo muy temeraria.…  Seguir leyendo »

Anatomía de la influencia es un tratado sobre los autores eminentes que pueblan el olimpo de la literatura occidental. Aunque en esta ocasión Harold Bloom es elegíaco y celebra sus 80 años con un testamento: “Ya no lucharé contra los Resentidos. Nos uniremos todos en nuestro polvo común”.

Bloom reitera en esta larga meditación su teoría sobre la ansiedad que corroe a los grandes escritores, nos contagia el fervor religioso por la lectura, nos introduce en la sutileza de su discurso hermético y nos remite al origen de su veneración: al inolvidable asombro que producen las grandes obras cuando se leen por primera vez.…  Seguir leyendo »

Debemos agradecer al historiador, profesor y crítico literario Jordi Gracia que nos haya puesto en solfa con su irritado y virulento panfleto El intelectual melancólico. Y aunque su violencia nos desconcierte, habrá que desear la mejor de las polémicas a la desaforada crueldad, la impaciente ferocidad y el descarnado espíritu de venganza con que el autor rehabilita al viejo y olvidado derecho natural a la furia.

En su orgullosa diatriba, Gracia zarandea sin piedad al intelectual melancólico que nos oprime con su juicio depresivo y esgrime alegremente las razones que lo dejan hecho unos zorros. Como no le importa el crédito social de su pesimismo y le traen al pairo sus credenciales, Gracia denuncia con arrogante destemplanza su resentimiento y su malvada resistencia a reconocer las virtuosas conquistas de nuestro tiempo.…  Seguir leyendo »

Tres decisivos testimonios sobre la gesta fundacional de la Europa contemporánea han sido editados entre nosotros al mismo tiempo. Las memorias del director de Les temps modernes, Claude Lanzmann (La liebre de la Patagonia en Seix Barral), su legendario documental sobre el Holocausto (Shoah, en la colección de cine editada por EL PAÍS en DVD) y el deslumbrante informe autobiográfico del polaco Jan Karski (Historia de un Estado clandestino en El Acantilado).

Las voces que se oyen crepitar en estos documentos evocan la epopeya de unos hombres y mujeres obligados a elegir su destino en un momento crucial de la historia europea, pero el relato de su lucha contra el nazismo no es el recuerdo de una hazaña bélica sino el sustento moral de la memoria que aún hoy encuentra su plenitud de sentido en aquella insurrección.…  Seguir leyendo »

Aunque la verdad novelesca no sea entre nosotros un objeto de culto, y la añoranza de su prestigio sólo merezca comentarios escépticos, vamos a tener al fin la ocasión de celebrar la novela profética que el nuevo siglo estaba esperando.

Es probable que a los lectores, siempre tan impacientes, les resulte desconcertante la arrogancia de un relato que a primera vista parece un hermético ejercicio de complejidad narrativa. Pero una vez dominado el hábito caprichoso de nuestra indolencia, esa pereza que tantos escritores se han propuesto halagar, podremos atisbar el sentido disimulado en la ficción de una obra reveladora.

Thomas Pynchon desafía en la mejor de sus novelas -Against the Day, Contraluz, Tusquets 2010- los límites de lo que puede ser contado.…  Seguir leyendo »

Cuando se hayan desvanecido los restos de nuestra egolatría nacional, ese amasijo de presunciones tan arrogantes como amargas, se comprenderá mejor la excepcionalidad de un libro que ha sido escrito lejos del influjo de la España saturnal. Distanciado por carácter de las furiosas polémicas mediáticas, exento del tributo intelectual ofrecido a los clanes dominantes, libre de la pasión fratricida que tanto consuelo procura a combatientes y tertulianos, el escritor y filósofo Rafael Argullol ha elaborado una majestuosa evocación literaria con el único yo digno de tal nombre.

Es probable que las 1.200 páginas de Visión desde el fondo del mar sean leídas como la recapitulación autobiográfica de un autor especialmente dotado para recordar los momentos más significativos de su intensa y prolífica existencia.…  Seguir leyendo »

Las primeras críticas a Autobiografía sin vida reflejan una preocupación que a mi juicio es superflua. Obviamente, y no sabes hasta qué punto, el libro se escabulle más allá de géneros y estilos, pero no debes creer que el portazo sea un asunto literario. La destreza narrativa de Félix de Azúa consolida el logro estético de su singular autobiografía, pero si nos detenemos a examinar las cuestiones formales perderemos de vista la conmovedora y brutal saciedad del autor.

Leyendo Autobiografía sin vida uno debe sucumbir a la taumaturgia del hombre que nos habla con severidad y concisión. Haber encontrado en unos selectos episodios de la Historia del Arte la huella del sí mismo, lo hace similar al Adán en cuyas entrañas podían verse las marcas del mundo.…  Seguir leyendo »

En nuestra memoria visual subsiste la vívida imagen del rostro desencajado de Mario Conde, la mirada perdida de Javier de la Rosa cuando muerde un bocadillo de mortadela en su celda de la cárcel Modelo, la pesadumbre de Luis Roldán rezongando entre los guardias civiles que lo arrastran hacia España, la demacrada desnutrición con que un espantado Francisco Correa se mete en la cárcel.

Un solo golpe de mala fortuna ha turbado su vanidosa apariencia y el vértigo por la gloria perdida les lleva a imitar sin decoro la mímica del arrepentimiento. En estos dolorosos momentos el instinto de los mamíferos aconseja inspirar la lástima que puede salvarlos de lo peor.…  Seguir leyendo »

Agarrando con fuerza el mástil de la lanza castellana, el mozo más aguerrido la clava en el costado del toro. Brota el primer chorro de sangre y mientras el animal embiste a los que tiene por delante los de atrás hincan en su cuerpo unas largas y afiladas hojas de acero. El toro busca entre la polvareda que levantan los caballos un lugar por dónde escapar, pero el cerco se ha cerrado y desangrándose agoniza ante el envalentonado griterío de los lanceros. Quien en este momento consiga darle "la más certera, valiosa y grave lanzada", aquel que vaya a ser considerado autor de la muerte del toro de la Vega podrá embadurnarse con su sangre, cortar sus testículos y enarbolarlos en la punta de su lanza, pasear por las calles de Tordesillas y ser aclamado como vencedor del torneo.…  Seguir leyendo »

A Edgar Morin

Se han desplomado sin estruendo las banales ilusiones españolas: nunca hubo nada parecido a la prosperidad anunciada por los publicistas gubernamentales y nunca estuvimos asentados con firmeza en algún sólido cimiento. Ni antes con Aznar, ni ahora con Zapatero.

La estafa financiera global ha dejado al descubierto la tramoya de una economía sostenida por una ficción contable: el país se enriquecía vendiéndose a sí mismo casas que no podía pagar. El hallazgo ha provocado un aterrorizado pasmo y, como si hubiera llegado la hora de enmendar el descarriado rumbo de nuestra generación, algunos se atreven a preguntar en qué nos equivocamos.…  Seguir leyendo »

La Ley de Memoria Histórica y los autos del juez Baltasar Garzón han provocado en buena parte de la sociedad española una escandalizada beligerancia, pero detrás de estas precipitadas muestras de indignación se distingue una escalofriante mueca de pavor, una desesperada angustia, un sacramental y espantoso lamento. Como si una trompeta surgida de los oscuros lindes del tiempo tronara anunciando la resurrección de los muertos y éstos regresaran a reparar las cuentas pendientes que los vivos quisieron olvidar.

No carecen de fundamento estos temores. En realidad, la disputa jurídica y política sobre la oportunidad de las exhumaciones y el sentido de la deuda contraída con los españoles arrojados al olvido de la fosa común nos permitirá afrontar la postergada culminación de nuestra Transición democrática y conocer al fin el motivo por el que la derecha católica impide la rehabilitación moral de las víctimas asoladas por el inmundo paseíllo de los fusilamientos furtivos.…  Seguir leyendo »

Las reflexiones del profesor y erudito George Steiner sobre la novela, el yo, la memoria, la tecnología y el imprevisible destino de nuestra cultura condensan su enciclopédica y admirada indagación crítica pero sólo uno de sus recientes comentarios ha excitado la atención de los lectores españoles. Alertados por la difusión que El País Semanal dio a las declaraciones de George Steiner, una autoridad en el estudio de la riqueza multilingüe europea, los miembros del PEN Club de Galicia se apresuraron a condenar con extremada dureza las poco condescendientes alusiones que Steiner dedica a la lengua gallega.

"¡No me compare el catalán con el gallego!",…  Seguir leyendo »

Una emigrante americana quiere invitar a sus padres a pasar en España las vacaciones de verano -los afectos dolidos por la distancia, ya se sabe- y se pone a cumplimentar los requisitos exigidos por la Administración para obtener el visado de estancia temporal.

Las gestiones, obviamente, requieren pasarse algunas horas haciendo cola. La eficacia administrativa que publicitan los ministerios mediante costosas campañas publicitarias no afecta a las áreas gubernamentales encargadas de tratar a los emigrantes. Las instalaciones habilitadas a tal fin son de estética postfranquista, y los funcionarios destinados a dar y recibir información, folletos o cuestionarios son escasos y desganados.…  Seguir leyendo »

En contraste con el aspecto de registrador de la propiedad que le caracteriza, Mariano Rajoy adopta un tono desenfadado para excitar la risotada de su público. Consciente de la impaciencia que padecen sus seguidores, se propone alimentar su despecho y ridiculiza el consenso científico internacional sobre las nefastas consecuencias del cambio climático.

José María Aznar ya no es el dignatario abrumado de otro tiempo y con alegría ofrece a los suyos ingeniosos motivos de entusiasmo. Agasajado en Valladolid con la distinción de Bodeguero de Honor de la Academia del Vino, Aznar levanta su copa para consolar a los que están hartos del control gubernamental.…  Seguir leyendo »