La OTAN, contra el Ejército islámico
Las tensiones con Rusia podrían dominar la inminente cumbre de la OTAN. Pero la Alianza tendría que dedicar una parte considerable de su programa en el sur de Gales a las amenazas que, después del asombroso recrudecimiento de las hostilidades de este verano, plantea el Estado Islámico (EI) en Irak y en Siria.
La OTAN debería desarrollar un triple plan de acción para pasar a la ofensiva frente al EI, fortalecer las defensas colectivas contra posibles ataques terroristas en nuestros propios territorios y preparar una estrategia a largo plazo que sirva para gestionar en los años venideros las transiciones en materia de seguridad, política y economía que tengan lugar en Oriente Próximo.… Seguir leyendo »