Bukele convierte la crisis de homicidios en un arma política
Entre el viernes 25 de marzo y el domingo 27, El Salvador acumuló casi 90 asesinatos, una cifra extraordinaria incluso para un país acostumbrado a aparecer en las listas de los más homicidas del mundo. Solo el sábado se registraron 62 homicidios: la cifra diaria más alta de muertes violentas de la que se tiene registro desde que terminó la guerra civil en 1992.
Pero Bukele ha conseguido convertir una tragedia en un escenario aglutinador, en el que de alguna manera él es a la vez protector del pueblo y víctima de una conspiración oscura de personas y entidades que van desde “la oposición” —así, en general— a “las ONG internacionales”, pasando por la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).… Seguir leyendo »