El Rey, a pie de obra
La actividad de Su Majestad el Rey, el Jefe del Estado, está pasando incomprensiblemente inadvertida para la inmensa mayoría del pueblo, desde que comenzó la vida excepcional en España por la pandemia del coronavirus.
Este hecho, además de insólito, dada su condición de máxima autoridad nacional, es inaceptable, al menos, por tres motivos. Primero; porque esta devastación del coronavirus nos afecta a todos los españoles, sin distinción de nuestro «nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social», por constatar lo evidente con las palabras del artículo 14 de la Constitución.
Segundo; porque el Rey, como Jefe del Estado, es el único que integra a todos y cada uno de nosotros de forma solidaria, «uti soci» (Lucas Verdú), y, por ello, personifica a la nación; así como la «unidad y permanencia» del Estado que hemos constituido y regulado en la Constitución.… Seguir leyendo »