Les negaron pasaportes a mis hijos porque una partera asistió su nacimiento
Cierto día de febrero en 2012, cuando todavía estaba embarazada, miraba el cielo desértico tapizado en nuestra casa en el área rural de Arizona. El bebé ya había bajado y mi vientre se sentía rígido como una piedra. Casi a la medianoche estaba en pleno trabajo de parto, dentro de una alberca inflable para niños decorada con peces coloreados con crayón. Mientras pujaba y gritaba a todo pulmón, esas caritas parecían sonreírme; por fin, mi hijo se deslizó sobre los brazos de mi partera. Dos años después, la misma mujer recibió a mi segundo hijo, quien nos sorprendió a todos cuando terminó en el piso del baño.… Seguir leyendo »