Esteban López-Escobar

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Recuerdo que en mi infancia y temprana adolescencia estaban de moda las habaneras y otros ritmos y canciones que llegaron de América. Era muy popular La bamba, una canción de autor desconocido, procedente de México. Una de las acepciones de «bamba» dice que la palabra es de origen africano y que significa fiesta o celebración. Era bastante conocida la versión de un coro de muchachos que dirigía el franciscano José Guadalupe Mojica, un cura guadalajarense que había hecho varias películas en Hollywood, como galán y tenor, antes de hacerse fraile; murió el año 1974 en Lima. Se afirma que, para honrar a Mojica, Agustín Lara compuso y le dedicó el bolero Solamente una vez.…  Seguir leyendo »

Para entender a este Gobierno hay que acudir, quizás, a la mitología. Tanto la griega como la latina ofrecen imágenes de gran utilidad para examinarlo. La mitología romana incluye en su repertorio a Jano, el dios de la doble cara: una de las caras mira hacia el pasado y otra hacia el futuro; y, a veces, una de las caras presenta un semblante amable y pacífico, mientras que la otra es agresiva e inquietante. Pero Jano tiene un solo cerebro, que controla y equilibra la expresión benévola con la agresiva malquerencia, que manifiesta por su parte el rencor o el odio.…  Seguir leyendo »

Escribo estas líneas motivado por los sucesos recientes en Catalunya, pero la idea me viene de lejos. En el 2006 me llamó la atención que la participación de los catalanes en el referéndum sobre la reforma del Estatut no alcanzara el 50%. Consideré entonces la progresiva pérdida de entusiasmo de los votantes en Catalunya.

No he vivido en Catalunya más que en períodos breves, vacacionales. Esa falta de inmersión en su vida cultural y social puede ser una deficiencia lamentablemente irreparable. Pero he de decir que, en los ambientes en los que he vivido, jamás he sentido menosprecio o rechazo hacia lo catalán.…  Seguir leyendo »

George Orwell imagina, en su novela 1984, un encuentro del protagonista, Winston Smith, con su colega Syme, otro funcionario del Ministerio de la Verdad, un filósofo que trabaja en la undécima edición del Diccionario de la Neolengua, que podría ser «la definitiva». «Creerás –le dice Syme a Winston– que nuestro trabajo principal consiste en inventar nuevas palabras. Pues nada de eso. Lo que hacemos es destruir palabras, centenares de palabras cada día. Estamos podando el lenguaje para dejarlo en los huesos». Vale la pena releer el capítulo V de la novela, en el que se incluye este episodio. «Cada año habrá menos palabras y el radio de acción de la conciencia será cada vez más pequeño», afirma orgullosamente Syme.…  Seguir leyendo »

El comportamiento del chavismo y del poschavismo –17 años instalados en el poder en Venezuela– ha cobrado un interés especial para los españoles, porque allí viven más de 200.000 de nuestros ciudadanos, y porque Podemos, una de las formaciones políticas del país, ha mantenido y mantiene relaciones excelentes con la clique-casta que ha sumido al país en una crisis social, económica, política y humanitaria que acaba de percibir con sus propios ojos el líder de Ciudadanos; una clique que pretende perpetuarse en el poder, empobreciendo material y espiritualmente a un país que hace algunos decenios vivía en una prosperidad casi arrogante.…  Seguir leyendo »

Los más ancianso del lugar recordarán a Sara Montiel que, esperando al hombre que más quería, pasó del cigarrillo al puro habano. La gran Sara fue la protagonista de La Violetera e inmortalizó la canción del mismo nombre que comenzaba así: Como aves precursoras de primavera, en Madrid aparecen las violeteras que pregonando... parecen golondrinas que van piando, que van piando.

Ahora no sólo pían las violeteras. Ahora pían nuestros hijos, nuestros nietos; incluso los adultos se han incorporado con pasión al pío-pío universal; de modo que nos pasamos el día entero saltando de rama en rama, piando, aunque digamos tuiteando, porque el inglés se impone por todos lados.…  Seguir leyendo »