Eugenio Trías Sagnier (Continuación)

Si tuviera que referirme al principal evento que se ha producido en el ámbito occidental en lo que va de año, descartaría hechos bélicos, políticos o de índole social. Tengo presente las condiciones que configuran la auténtica noticia: novedad, naturaleza sorprendente del asunto, relevancia, significación, impacto. Todos estos rasgos se dan en algo que puede pasar desapercibido, por mucho que se haya hablado de ello una y otra vez. Me refiero a la aparición, en las librerías, de un libro del pontífice romano, Benedicto XVI, sobre Jesús de Nazaret (en español, en traducción de Carmen Bas Alvarez).

La prueba de fuego de todo gran teólogo consiste en afrontar el difícil reto de aproximarse a la figura del inspirador de la religión cristiana.…  Seguir leyendo »

El inicio de la temporada, tras las vacaciones de agosto, es siempre un buen momento para las reflexiones globales. Importa observar la actualidad con el microscopio para no perdernos en una maraña de signos indescifrables, pero en ocasiones tiene mucho interés y sentido el uso del telescopio. Esa exigencia se agrava en una época de transformaciones imprevisibles. Se originaron a finales del siglo pasado, quizás desde la caída del Muro de Berlín y el fin de la política de bloques, o acaso también a partir de las nuevas tecnologías que han revolucionado la informática y la biología.

Si miramos hacia atrás nos encontramos con un atlas histórico muy preciso: 1.000 años de crecimiento, desde la infancia y la juventud hasta la madurez, de la gran cultura y civilización occidental, inicialmente europea, hoy esparcida por todo el globo terráqueo.…  Seguir leyendo »

Un anuncio municipal invita a todos los que llegan a Barcelona a visitar los museos de la ciudad. La perspectiva de vacaciones puede ser una ocasión única para acoger esa iniciativa del Ayuntamiento barcelonés. A veces, esos reclamos publicitarios deben ser alentados y alabados. Ojalá todos, turistas y conciudadanos, recorrieran esos museos donde la ciudad encierra sus mejores esencias.

Desde muy pequeño, gracias a una mujer muy culta y muy andarina, mi abuela materna, recorrí casi todos los museos barceloneses que entonces existían. Visité el Museo de la Ciudad, con los misteriosos pasadizos de la vieja ciudad romana, la magnífica colección de tallas medievales del Museo Marés, el excelente conjunto de temas y motivos marinos del Museo de Las Atarazanas, a través del cual descubrí la vocación trasatlántica de mis antepasados.…  Seguir leyendo »

Nuestra sociedad, la que corresponde a la actual hora global, no queda suficientemente descrita si se la caracteriza como sociedad de masas. Tampoco la cultura en que nos hallamos integrados. Este concepto -las masas- debe ser repensado y criticado en profundidad. Lo masivo sería el sustrato inerte, emocional e intelectual, sobre el que se sustentan infinidad de figuras minoritarias.

El viejo paradigma jerárquico de élites gobernantes frente a masas en rebelión pertenece a otra época histórica. La nuestra nada tiene que ver ya con la que compartieron, antes de la II Guerra Mundial, Freud y Ortega y Gasset, o en los años treinta Walter Benjamin y T.…  Seguir leyendo »

Creo que la biología y la teoría de la evolución no son resolutivas en torno a los grandes asuntos que plantean las tres ideas kantianas (teológica, cosmológica y antropológica). El dogmatismo ateo es tan sospechoso de fundamentalismo e integrismo como la facundia y la ingenuidad de quienes se refugian en argumentos del siglo XIII para probar la existencia de Dios. Éstos fueron perfectamente válidos en sus contextos históricos, pero hoy necesitan ser renovados y replanteados.

Como he dicho con frecuencia, es necesario secularizar la razón. Ésta no es dominio exclusivo de aquella ciencia que en un determinado contexto se halla en el centro de los debates.…  Seguir leyendo »

Nos hallamos en tiempo pascual. Éste se prolonga hasta la pascua granada, en el intervalo que media entre la gran Pascua de Resurrección y las fiestas de Pentecostés y la Trinidad. Santiago de la Vorgine, en La leyenda dorada, llama a esta época del año «tiempo de reconciliación». Recientemente recordaba Manuel Hidalgo la desproporción existente entre la celebración, en nuestro mundo cristiano occidental (católico y protestante), de los misterios dolorosos de la pasión y muerte de Cristo, a los que se dedica toda una semana, y la fiesta de la resurrección. Si atendemos a las impresionantes piezas litúrgicas de J. S.…  Seguir leyendo »

Una enigmática sentencia de Heráclito suele traducirse así: el carácter es, para el hombre, el destino. No es, necesariamente, la mejor traducción, pero puede aceptarse como la más expresiva e inteligible.

El carácter es lo más difícil de remover. Se mantiene en su tremenda rigidez, a modo de sustrato pétreo de lo que somos. Eso vale también para las naciones. Siempre que tratamos con extranjeros se advierte en la mirada del interlocutor, aunque sea de forma incidental, la reflexión relampagueante sobre ese suelo rocoso en el que se asienta nuestra personalidad. Después, sólo después, puede descubrir quizás nuestra individualidad.

La mirada de Medusa del interlocutor extranjero nos petrifica en un carácter que es destino: el carácter nacional.…  Seguir leyendo »

Pensar en inquietantes escenarios de Novísimos o Postrimerías puede ser un apropiado estupefaciente: nos aleja del marasmo de mezquindad y mediocridad en que la vida política local española se halla sumida. Por múltiples razones, llevo varias semanas leyendo el Libro de la Revelación. Esa lectura me permite tomar distancias respecto a eventos demasiado próximos.

Respondo al deprimente espectáculo de los políticos locales modificando drásticamente el escenario de mis lecturas. Mi atención puede, entonces, girar hacia tiempos y espacios remotos: los más apartados de la cotidianeidad política y periodística.

El momento es malo. Muy malo. Pero la sociedad española está más sana y salva que sus políticos.…  Seguir leyendo »

En una cena de amigos y familiares, el pasado verano, se inició la conversación por las acostumbradas rutas de la política local. Para evitar una estéril y tediosa incursión en los tópicos de siempre, que en los últimos tiempos pueden dar lugar a viscerales enfrentamientos, se me ocurrió dar un giro a la conversación suscitando un tema diferente -y algo exótico-, un tema que a todos nos importa (tanto o más que el pronóstico respecto a elecciones próximas). Comencé, de forma socrática, a interrogar a unos y a otros sobre sus creencias relativas a lo que sucede tras la muerte: ¿es la muerte el fin definitivo de nuestra vida?…  Seguir leyendo »