Por qué los autoritarios atacan las artes
En 1937, los líderes ascendentes del Tercer Reich organizaron dos exposiciones de arte en Múnich. Una de ellas, la “Gran exposición de arte alemán”, tenía arte que Adolf Hitler consideraba aceptable y reflejaba una sociedad aria ideal: representativa, con gente rubia en poses heroicas y paisajes pastorales del campo alemán. La otra presentaba lo que Hitler y sus seguidores denominaban “arte degenerado”: obras modernas o abstractas, y arte producido por personas que los nazis desaprobaban (judíos, comunistas o sospechosos de serlo). El “arte degenerado” fue presentado con desorden y caos, acompañado de etiquetas despectivas, grafiti y entradas de catálogo que describían “los cerebros enfermos de aquellos que usaron el pincel o el lápiz”.… Seguir leyendo »