El ascenso de Zuma
La preocupación por la elección de Jacob Zuma como presidente de Sudáfrica desdibuja un importante hito: por primera vez en decenios, una nación subsahariana tiene al timón a un adalid de las personas comunes y corrientes.
La política africana ha sido durante mucho tiempo dominio exclusivo de aristócratas, soldados y tecnócratas. Incluso con la propagación de las elecciones democráticas, los dirigentes de la región suelen proceder de las filas de los soldados (Uganda, Ruanda, Zimbabue), de las dinastías familiares (Togo, Kenia...) o de entre los profesores universitarios, abogados y economistas (Ghana, Malaui, Liberia). Ahora Sudáfrica, motor económico de la región y sede de sus universidades, grandes empresas y medios de comunicación más avanzados, tiene al timón un antiguo pastor de cabras, un dirigente africano con don de gentes.… Seguir leyendo »