
Un capitalismo sin alternativa
Desde la caída de la Unión Soviética, va a hacer ya un cuarto de siglo, y desaparecidos prácticamente los sistemas de producción tradicionales, el capitalismo se ha universalizado sin que se divise una alternativa. La sedicente China comunista es ya un país capitalista, aunque manejado desde el poder concentrado en el partido.
Desde el capitalismo comercial que se consolida en el siglo XIV, pasando por el industrial que comienza a finales del XVIII, hasta el financiero que con carácter dominante avanza desde los años 80 del siglo pasado, la novedad consiste —aunque no se haya recalcado lo suficiente— en que el capitalismo en esta última etapa no se enfrenta ya a un orden socioeconómico alternativo, como en la pasada centuria lo hiciera al socialismo.… Seguir leyendo »