La concordia sentimental
Decía Josep Pla que la tendencia a la mermelada sentimental lo pringa todo. La concordia era, en este sentido, una rebanada demasiado apetecible y ahora mismo, una vez que le han untado los indultos del procés, no hay por dónde cogerla. Por eso urge quitarle de encima tanta confitura, para que podamos volver a degustarla equilibrada.
En primer lugar, conviene distinguirla del consenso reducido a un acuerdo, que ciertamente puede ser valioso, pero que en ningún caso agota la relación que la concordia exige. La concordia se mueve fundamentalmente en el plano moral, el consenso lo hace, sobre todo, en el político.… Seguir leyendo »